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First record of Hydrolagus melanophasma James, Ebert, Long & Didier, 2009 (Chondrichthyes, Chimaeriformes, Holocephali) from the southeastern Pacific Ocean
Primer registro de Hydrolagus melanophasma James, Ebert, Long & Didier, 2009 (Chondrichthyes, Chimaeriformes, Holocephali) en el Océano Pacífico suroriental
Registro en:
10.3856/vol40-issue1-fulltext-23
Autor
Bustamante, Carlos
Flores, Hernán
Concha-Pérez, Yhon
Vargas-Caro, Carolina
Lamilla, Julio
Bennett, Mike
Resumen
The eastern Pacific black ghost shark, Hydrolagus melanophasma is reported from deep waters off Chile and is described from specimens collected off Valdivia at depths of 1150 to 1720 m. This species is distinguished from all other members of the genus by its large, curved dorsal fin spine, which extends beyond the dorsal fin apex; a second dorsal fin of uniform height along the caudal peduncle; large pectoral fins extending beyond the pelvic fin insertion; and a uniform black color of the body. Catch records of this species in Chile suggest a discontinuous distribution along the continental slope of the eastern Pacific Ocean, restricted to the Middle America and Atacama trenches. These observations elevate the number of chimaeroid fishes inhabiting Chile to five species. La quimera negra del Pacífico este, Hydrolagus melanophasma es reportada desde aguas profundas frente a Chile y se describe a partir de especímenes colectados en Valdivia en profundidades ente1150 y 1720 m. Esta especie se diferencia de los otros miembros del género por su larga y curvada espina dorsal, la cual se extiende más allá del ápice de la aleta dorsal; presenta una segunda aleta dorsal de altura uniforme a lo largo del pedúnculo caudal; grandes aletas pectorales que se proyectan sobre la inserción de las aletas pélvicas, además de su coloración negra uniforme en el cuerpo. Los registros de captura de esta especie en Chile sugieren una distribución discontinua a lo largo del talud continental del océano Pacifico este, restringido a las fosas oceánicas de Atacama y Mesoamérica. Estas observaciones aumentan a cinco el número de especies de peces Chimaeriformes que habitan aguas chilenas.