Tesis
Campañas de Gobierno y cultura social no discriminatoria
Fecha
2006Autor
Miranda, Macarena
Institución
Resumen
El Sida es una enfermedad que excede las definiciones meramente sanitarias de las
epidemias conocidas históricamente. En ello incide que su transmisión se relacione a
conductas de riesgo en las relaciones sexuales o por uso intravenoso de drogas.
Que la principal vía de transmisión en Chile sea la sexual ha tenido implicancias en
el ámbito de la representación de la sexualidad de las personas y las formas como nuestra
sociedad se aproxima a este tema. El VlH/Sida tiene que ver con los va lores y con los
comportamientos que orientan la convivencia social y familiar.
Es por ello que el sida es un tema social de relevancia, en donde el Gobierno de
Chile también participa. Existen campañas preventivas, las que siempre se han visto
marcadas por grandes polémicas y por el constante ataque de la Iglesia Católica y sectores
que se oponen a la promoción del condón.
De ahí, se hace difícil imponer campañas gubernamentales que orienten a la
sociedad chilena a poseer una conciencia y un a cultura social con respecto o a la no
discriminación.
El sida se ha vuelto un tema tabú, pues su vía de contagio principalmente es la
sexual, en donde se presupone que quienes son seropositivos poseen conductas promiscuas
o incluso muchos piensan que sólo los homosexuales están en riesgo de contagiarse.
Las estadísticas muestran exactamente lo contrario, pues el sector con más riesgo
son las mujeres, y no precisamente aquellas que mantengan relaciones sexuales fortuitas o
fu era del matrimonio, sino mujeres casadas y fiel es que han sido contagiadas por su propio
esposo.
Por otro lado quienes padecen de sida son discriminados por una sociedad que poco
conoce de las vías de transmisión y de los derechos fundamentales. Por discriminación no
sólo me refiero a la discriminación laboral, de atención dental, entre otras, sino en cómo
estas personas se desarrollan dentro de una sociedad que los ve con miedo, con temor, con
prejuicios, etc.
Es por esto que me parece de total importancia el ro l que el Estado de Chile debe
tomar ante este tema, el Sida no es una enfermedad que afecte sólo a quienes lo padecen,
sino a la sociedad en su totalidad.
La prevención, los derechos de las personas cero positivas y la creación de una
cultura antidiscriminatoria son de total responsabilidad del Gobierno y de la democracia,
pues lo que prima en ésta es el bien común de todos los ciudadanos por igual.