Tesis Magíster
Representaciónes sociales acerca de la alfabetización en escritura académica: el caso de historia
Autor
Olivares-Espinoza, María Gabriela
Institución
Resumen
El ingreso de los estudiantes a la Universidad implica una serie de nuevas exigencias, de las
cuales dependerá el éxito o el fracaso de la formación de pregrado. Una de ellas está
relacionada con la aplicación de estrategias para la comprensión, interpretación y
producción del nuevo conocimiento, propias de las comunidades disciplinares en que el
sujeto ha de insertarse. En esta inserción, la alfabetización académica, entendida como el
conjunto de nociones y estrategias que posibilitan el análisis y la producción de textos que
favorecen el aprendizaje (Carlino, 2003), juega un rol fundamental.
Si consideramos que los sujetos al ingresar a las universidades ya han sido alfabetizados, es
decir, ya han aprendido a leer y escribir, en este nivel superior de educación deben aprender
a resignificar la lectura y la escritura, por cuanto estas han de transformarse en el sustrato
del propio proceso de aprendizaje, y a su vez, en una forma de apropiarse y compartir el
conocimiento disciplinar. Desde esta perspectiva, entendemos que la alfabetización
académica no es una competencia estática, lograda y aprendida en la educación básica y
media, sino que es un estado, un proceso en el que deben actuar, a través de la enseñanza,
las instituciones de educación superior. En este contexto, es evidente que tanto la escritura
como la lectura son prácticas que están socialmente situadas y, por tanto, deben
desarrollarse en este nuevo espacio de aprendizaje.
La alfabetización académica en escritura es concebida como una herramienta con un alto
potencial epistémico, que permite el desarrollo, la revisión y la transformación del propio
saber. Bazerman (1988) destaca el poder epistémico de la escritura, señalando que mediante
el discurso creado los sujetos constantemente reconstruyen y elaboran su conocimiento de
mundo. En este sentido, escribir en la universidad implica la activación de una serie de
estrategias que posibilitarán la construcción y la creación de ese nuevo conocimiento.
En el ámbito de la producción, Hernández (2009) señala que la apropiación de la
alfabetización en escritura permite construir y deconstruir, defender o cuestionar ideas,
procesos que se consideran esenciales en la formación universitaria de pregrado. De este
modo, y valiéndose de la escritura, los estudiantes reconstruyen sus conocimientos,
reflexionan sobre él y lo confrontan con sus conocimientos previos y experiencias. Estas ideas se sustentan en el modelo de ‘transformar el conocimiento’ de Bereiter y Scardamalia
(1987), quienes señalan que los escritores expertos son capaces, además de recuperar el
contenido pertinente para la generación de un texto, de integrarlo para elaborar uno nuevo.
En este sentido, es importante, también, el desarrollo de las habilidades argumentativas y
de pensamiento crítico, puesto que ambas entran en acción cuando se debe relacionar y
articular el saber que es ajeno con el saber propio construido. Al respecto, Dolz (1993:68)
señala que: “la argumentación puede asimilarse a una especie de diálogo con el
pensamiento del otro para transformar sus opiniones”. Si consideramos que dentro de las
comunidades discursivas se produce conocimiento, una de las formas de validarlo es a
través del despliegue argumentativo que permite a los sujetos convencer a otros de una
nueva propuesta. Por consiguiente, el proceso de alfabetización académica en escritura
precisa habilidades argumentativas, pues se aspira a la formación de profesionales capaces
de actuar sobre el conocimiento, generando la reestructuración de sus esquemas de
pensamiento, determinado por las disciplinas. PFCHA-Becas Magíster en Lingüística Aplicada 81p. PFCHA-Becas TERMINADA