Producto de los graves desequilibrios que ha provocado el hombre, sobre todo después de la revolución industrial, en el aumento de las concentraciones de gases efecto invernadero, como el CO2, la tierra atraviesa por un período de aumento paulatino de las temperaturas, lo que se confirma por variadas investigaciones, que vaticinan un futuro poco alentador. Organismos internacionales como el IPCC, preocupados por esta situación evalúan fórmulas para contrarrestar las grandes emisiones de carbono que llegan a la atmósfera cada año. Los bosques en este sentido tienen mucho que decir, ya que por medio de la fotosíntesis, son capaces de absorber CO2 de la atmósfera, liberando O2 al ambiente e incorporando carbono a su biomasa. Así en este trabajo, se analiza un rodal del tipo forestal Lenga, subtipo lenga – coigue, ubicado en la Reserva Forestal Coihaique, XI Región, en cuanto a la cantidad de carbono que este logra fijar en un plazo de 30 años con y sin aplicación (simulada) de una corta de protección. Del análisis de los datos, se concluye que a nivel de árbol existen 75.2 ton C/ha, las cuales se distribuyen principalmente en un 72% en los fustes, 18% en las raíces y 10 % en la copa. A nivel de las distintas fuentes, el carbono fijado, llega a un total de 147 ton C/ha, siendo la más importante los árboles mayores a 5 cm de DAP que participan con un 51% siguiendo en importancia el suelo con un 27% y la necromasa con 20%. Los valores de hojarasca y arbustivas no son relevantes ya que su participación no alcanza el 1%. Si se analiza la condición futura del rodal, se puede concluir que la situación sin intervención alcanza las 241.75 tonC/ha, este valor aumenta a 319.8 tonC/ha para el rodal futuro con intervención. De esta manera, en el plazo de 30 años, el total de las fuentes del rodal sin intervención fijan 3.1 tonC/ha/año, aumentando a 5.7 tonC/ha/año luego de realizada la corta de protección.Producto de los graves desequilibrios que ha provocado el hombre, sobre todo después de la revolución industrial, en el aumento de las concentraciones de gases efecto invernadero, como el CO2, la tierra atraviesa por un período de aumento paulatino de las temperaturas, lo que se confirma por variadas investigaciones, que vaticinan un futuro poco alentador. Organismos internacionales como el IPCC, preocupados por esta situación evalúan fórmulas para contrarrestar las grandes emisiones de carbono que llegan a la atmósfera cada año. Los bosques en este sentido tienen mucho que decir, ya que por medio de la fotosíntesis, son capaces de absorber CO2 de la atmósfera, liberando O2 al ambiente e incorporando carbono a su biomasa. Así en este trabajo, se analiza un rodal del tipo forestal Lenga, subtipo lenga – coigue, ubicado en la Reserva Forestal Coihaique, XI Región, en cuanto a la cantidad de carbono que este logra fijar en un plazo de 30 años con y sin aplicación (simulada) de una corta de protección. Del análisis de los datos, se concluye que a nivel de árbol existen 75.2 ton C/ha, las cuales se distribuyen principalmente en un 72% en los fustes, 18% en las raíces y 10 % en la copa. A nivel de las distintas fuentes, el carbono fijado, llega a un total de 147 ton C/ha, siendo la más importante los árboles mayores a 5 cm de DAP que participan con un 51% siguiendo en importancia el suelo con un 27% y la necromasa con 20%. Los valores de hojarasca y arbustivas no son relevantes ya que su participación no alcanza el 1%. Si se analiza la condición futura del rodal, se puede concluir que la situación sin intervención alcanza las 241.75 tonC/ha, este valor aumenta a 319.8 tonC/ha para el rodal futuro con intervención. De esta manera, en el plazo de 30 años, el total de las fuentes del rodal sin intervención fijan 3.1 tonC/ha/año, aumentando a 5.7 tonC/ha/año luego de realizada la corta de protección.Producto de los graves desequilibrios que ha provocado el hombre, sobre todo después de la revolución industrial, en el aumento de las concentraciones de gases efecto invernadero, como el CO2, la tierra atraviesa por un período de aumento paulatino de las temperaturas, lo que se confirma por variadas investigaciones, que vaticinan un futuro poco alentador. Organismos internacionales como el IPCC, preocupados por esta situación evalúan fórmulas para contrarrestar las grandes emisiones de carbono que llegan a la atmósfera cada año. Los bosques en este sentido tienen mucho que decir, ya que por medio de la fotosíntesis, son capaces de absorber CO2 de la atmósfera, liberando O2 al ambiente e incorporando carbono a su biomasa. Así en este trabajo, se analiza un rodal del tipo forestal Lenga, subtipo lenga – coigue, ubicado en la Reserva Forestal Coihaique, XI Región, en cuanto a la cantidad de carbono que este logra fijar en un plazo de 30 años con y sin aplicación (simulada) de una corta de protección. Del análisis de los datos, se concluye que a nivel de árbol existen 75.2 ton C/ha, las cuales se distribuyen principalmente en un 72% en los fustes, 18% en las raíces y 10 % en la copa. A nivel de las distintas fuentes, el carbono fijado, llega a un total de 147 ton C/ha, siendo la más importante los árboles mayores a 5 cm de DAP que participan con un 51% siguiendo en importancia el suelo con un 27% y la necromasa con 20%. Los valores de hojarasca y arbustivas no son relevantes ya que su participación no alcanza el 1%. Si se analiza la condición futura del rodal, se puede concluir que la situación sin intervención alcanza las 241.75 tonC/ha, este valor aumenta a 319.8 tonC/ha para el rodal futuro con intervención. De esta manera, en el plazo de 30 años, el total de las fuentes del rodal sin intervención fijan 3.1 tonC/ha/año, aumentando a 5.7 tonC/ha/año luego de realizada la corta de protección.Producto de los graves desequilibrios que ha provocado el hombre, sobre todo después de la revolución industrial, en el aumento de las concentraciones de gases efecto invernadero, como el CO2, la tierra atraviesa por un período de aumento paulatino de las temperaturas, lo que se confirma por variadas investigaciones, que vaticinan un futuro poco alentador. Organismos internacionales como el IPCC, preocupados por esta situación evalúan fórmulas para contrarrestar las grandes emisiones de carbono que llegan a la atmósfera cada año. Los bosques en este sentido tienen mucho que decir, ya que por medio de la fotosíntesis, son capaces de absorber CO2 de la atmósfera, liberando O2 al ambiente e incorporando carbono a su biomasa. Así en este trabajo, se analiza un rodal del tipo forestal Lenga, subtipo lenga – coigue, ubicado en la Reserva Forestal Coihaique, XI Región, en cuanto a la cantidad de carbono que este logra fijar en un plazo de 30 años con y sin aplicación (simulada) de una corta de protección. Del análisis de los datos, se concluye que a nivel de árbol existen 75.2 ton C/ha, las cuales se distribuyen principalmente en un 72% en los fustes, 18% en las raíces y 10 % en la copa. A nivel de las distintas fuentes, el carbono fijado, llega a un total de 147 ton C/ha, siendo la más importante los árboles mayores a 5 cm de DAP que participan con un 51% siguiendo en importancia el suelo con un 27% y la necromasa con 20%. Los valores de hojarasca y arbustivas no son relevantes ya que su participación no alcanza el 1%. Si se analiza la condición futura del rodal, se puede concluir que la situación sin intervención alcanza las 241.75 tonC/ha, este valor aumenta a 319.8 tonC/ha para el rodal futuro con intervención. De esta manera, en el plazo de 30 años, el total de las fuentes del rodal sin intervención fijan 3.1 tonC/ha/año, aumentando a 5.7 tonC/ha/año luego de realizada la corta de protección.FONDEFINGENIERO FORESTAL75FONDEFTERMINADA