info:eu-repo/semantics/masterThesis
La dinámica socioeconómica como condicionante del patrimonio cultural, el caso de Chalcatzingo
Autor
ANA CLAUDIA GONZÁLEZ ÁNDRADE
Resumen
La globalización ha sido un proceso importante a nivel mundial por estar presente en todos los ámbitos de la actualidad como económico, tecnológico, social y cultural que a su vez lo intercomunica entre los distintos países del mundo, dando así ciertas transformaciones sociales y políticas que brindan un carácter global.
Reuniendo los postulados de diversos autores que se desarrollan en su propio apartado, esta investigación propone al fenómeno globalizador como el proceso de multiculturalidad, mercantilización y aumento de tecnologías de la información que caracteriza a la fase reciente del capitalismo, a partir de los años setenta. Para los fines de la presente investigación es fundamental establecer como la transformación del espacio social, es decir, las redes sociales entre distintos individuos o colectivos en un mismo territorio son determinadas por la actual dinámica socioeconómica dominada por la globalización.
Es fundamental retomar el análisis propuesto por Ramírez y López (2003), quienes proponen al territorio como un concepto polisémico en tanto es, la dimensión real del espacio socializado y apropiado, con atributos de identidad, y, al mismo tiempo, un espacio delimitado y controlado, enmarcado en un determinado momento histórico. Es preciso reconocer estas categorías en el momento actual, en donde el sistema económico afecta en cada una y las transforma. Es decir, el territorio será visto tanto en los limites políticos a lo largo de la historia, como las relaciones sociales que han existido en él. La dinámica socioeconómica entendida desde los procesos de cambio, como la urbanización, el cambio de apropiación espacial y las identidades reconfiguradas que han sido transformadas en los últimos años, son elementos fundamentales de análisis para la presente investigación, para esto se hace a comparación mediante libros, fotos satelitales, tesis, entre otros para poder conocer
tanto lo tangible que es el territorio y como los habitantes se han adaptado y transformado sus relaciones.
La estructura económica es fundamental para el territorio. Se parte de la premisa de que toda relación económica necesita como base la naturaleza, por lo que sus efectos impactan en el territorio tanto en lo social, como lo económico, lo urbano y en el medio ambiente; por ejemplo en la necesidad de infraestructura para abarcar las viviendas crecientes o los desarrollos habitacionales propuestos por grandes empresas, lo cual implica la construcción de carreteras, habilitar el drenaje, agua, en otros servicios públicos.
El territorio donde se enmarcan las relaciones socioespaciales a investigar como objeto de estudio es la localidad de Chalcatzingo, presenta una actividad social y cultural de más de tres mil años, y hasta la fecha reúne elementos básicos de las creencias prehispánicas del mundo: la montaña, la cueva y el agua.
Chalcatzingo se localiza en el municipio de Jantetelco, al oriente de Morelos a cinco km de la carretera 160 Cuautla-Izúcar-Oaxaca y a nueve km de la autopista Siglo XXI, así como hoy en día, en siglos pasados también tenía un lugar estratégico para conexiones sociales y terrestres por estar geográficamente al centro del país, entre el Golfo de México y el Océano pacifico lo que ha facilitado la estancia de distintas sociedades. La localidad de Chalcatzingo se encuentra en las faldas de dos cerros: el Ancho -Cantera o Chalcatzingo- y el Delgado, considerados por varias
culturas como montañas sagradas. Su paisaje permite imaginar y apreciar el área que dominaban con la observación sus antiguos habitantes, estas características hacen a la región reconocida por visitantes e investigadores.
Desde el establecimiento de la “La colonia Olmeca”, en 700 a. de C. hasta las haciendas azucareras coloniales y las de principios del presente siglo, la producción campesina y su mano de obra. Junto con los elementos que han sido legado de las diferentes culturas como sus tradiciones o lo tangible como los basamentos, los cuexcomates, vajillas, entre otros, son elementos que dan significado al lugar y han servido para Chalcatzingo –con sus 3500 años de antigüedad- ocupe un lugar dentro de la historia del país. Dando así al patrimonio cultural ya sea reconocido por la institución y/o por los pobladores -lo que se nombra como patrimonialización-, una oportunidad de aprovechar sus recursos para atracción de turismo debido a que este proceso globalizante monetiza no solamente materias primas, sino también, bienes intangibles y tangibles como el patrimonio cultural, es el caso de la venta y renta de terrenos en la calle Alatriste, el Festival del Sol, la oferta de servicios como balnearios, hoteles, entre otros.
Por ello, el objeto de este trabajo de investigación es la localidad de Chalcatzingo, cuya dinámica socioeconómica visibiliza las múltiples problemáticas que se mencionan anteriormente: el cambio de actividades primarias a terciarias, en otras palabras, de productivas a prestación de servicios, ha fomentado diversas transformaciones en el territorio, como cambio de uso de suelo y la urbanización del lugar, sin abandonar por completo las arraigadas tradiciones que se han
conservado desde la época prehispánica En el capítulo tercero se habla sobre el impacto territorial y socioeconómico que se ha presentado en la localidad a consecuencia del patrimonio impuesto de Chalcatzingo, dígase la zona arqueológica, que a su vez funciona como tejedora de identidad. Para el cuarto capítulo se
presentan las principales manifestaciones culturales del pueblo y las que acontecen en el Cerro Ancho, las cuales son: San Mateo -del 19 al 21 de septiembre-, día de la cruz -3 de mayo- y día de la Virgen de Guadalupe -12 de diciembre-, a lo que hemos llamado “patrimonio vivido”.
Cabe resaltar que el trabajo de campo de esta investigación concluyó en el año 2019 con información recabada antes de la pandemia COVID-19, al momento de presentar el examen de grado en 2022 puede que ciertos datos ya no tengan continuidad. Dado que, el Festival del Sol no se llevó a cabo en los años 2021 y 2022, la zona arqueológica se mantuvo cerrada por un año, sin embargo fue la primera a nivel nacional en reabrir, así mismo, los pobladores se organizaron día con día para hacer guardia a la entrada del pueblo para impedir el acceso a turistas, de esta
manera los comercios se vieron afectados durante el primer año de pandemia.