Crónica narrativa contemporánea: los límites de la ficción y los abismos de lo real
Fecha
20182018
Institución
Resumen
Dentro de la discusión sobre los límites de lo literario en la época del debilitamiento de las fronteras genéricas, y de las “literaturas post-autónomas” (Ludmer, 2010), cabe situar el caso de la crónica narrativa (o periodístico-literaria) contemporánea, aquella que surge desde la praxis periodística, pero a través de su perspectiva autorial y su tratamiento estilístico supera tanto la función informativa como la obsolescencia de lo coyuntural, ya que apunta a temas y motivos universales que laten bajo lo concreto de una historia noticiable (Poblete Alday, 2013, 2014). En particular, nos interesa analizar aquí el caso de aquella crónica que aborda las diversas formas de violencia (crisis migratoria, narcotráfico, pandillas, corrupción, mayormente), y que exhibe puntos en común con las temáticas y estrategias narrativas de la literatura fantástica.
Hablamos de textos que resaltan por la conjunción entre la ferocidad de las historias y su crudeza narrativa. Textos que nos hablan de “[…] mujeres violadas frente a sus familias, hombres mutilados por el filo de machetes, cuerpos rebanados, gente que huye de la muerte que su lugar natal les ofrece, policías delincuentes, violadores, asesinos, gente que viaja en techos de trenes vacíos. Heridas, llagas, secuelas, cadáveres” (Martínez, 2010). El horror en estas crónicas surge de la evidencia de la capacidad humana para perpetrar el mal, pero –a diferencia de los relatos de terror clásicos- como lectores aquí no tenemos la salvaguarda de la ficción. Una vez que dejamos de leer, el peligro sigue estando allá afuera, naturalizado, pero también aquí dentro, en nuestra propia naturaleza humana.