dc.description | El modelo de desarrollo imperante, lejos de brindar mejores condiciones de vida a un sector de la población más amplio, ha agudizado una serie de relaciones que desembocan actualmente en mayores desequilibrios territoriales entre ámbitos urbanos y rurales. Tales son los alcances que a nivel mundial más del 50% de la población radica ya en áreas urbanas, situación que se agudiza de acuerdo a la región. Por ejemplo, América Latina en promedio presenta un nivel de urbanización entre el 65 y 70%. Lo anterior, a consecuencia de las crecientes limitaciones de un medio rural para ofrecer mejores expectativas de vida a su población. En contraste con la visión de mayores oportunidades de empleo, infraestructura, equipamiento, servicios; que ofrecen las ciudades, se ha agudizado por la proliferación de movimientos urbanos-urbanos.
Dicho crecimiento desproporcionado de las ciudades ha rebasado toda posibilidad de atender las demandas sociales referentes a satisfactores básicos, por lo que actualmente somos testigos de ciudades con severas problemáticas de segregación social, inseguridad, carentes de infraestructura, servicios básicos: agua, drenaje, salud, educación, vivienda digna, con entornos cada vez más degradados, entre otros. En este contexto, en México las ciudades de tamaño medio —aquellas de cien mil a menos de un millón de habitantes— están teniendo un protagonismo cada vez mayor en la concentración de la población en el ámbito del Sistema Urbano Nacional y, desgraciadamente, también en el escenario de la proliferación de los problemas sociales, ambientales y territoriales derivados de cómo crecen. Urbanización, sociedad y ambiente. Experiencias en ciudades medias analiza algunos rasgos relevantes sobre problemáticas urbanas comunes en ciudades de tamaño medio, básicamente a través del estudio de caso de la ciudad de Morelia y el complemento de la visión latinoamericana a través de los casos de Valparaíso en Chile y Florianópolis en Brasil. [Los coordinadores]. | |