Deportes de Combate en la Formación de Licenciados en Educación Física, Recreación y Deportes
Autor
Pineda Arango, Lina Lorena
Pinto Brito, Lácides Anrtonio
Institución
Resumen
Los deportes de combate se han incluido progresivamente en los currículos escolares y universitarios, ya que contribuyen significativamente al desarrollo integral del ser humano, fortaleciendo en el estudiante habilidades motrices, cognitivas, socioafectivas y axiológicas; el combate es inherente al ser humano y por medio de estos deportes se da un espacio para la expresión de fuerza normada, que permite la manifestación de emociones y sentimientos a través de la corporeidad de forma regulada (Espartero y Gutierrez, 2004) .
Sin embargo, la aparición de estos deportes en la educación física a nivel escolar y en los programas profesionales de Educación Física, Recreación y Deportes y a fines, no se han difundido de manera suficiente en nuestro contexto, por lo que no se aprovechan todas las bondades de los mismos. Los deportes de combate han sido relegados de los currículos de educación física producto del desconocimiento de sus beneficios y de los falsos estereotipos y creencias de connotación de violencia; dicho esto, por el contrario estos deportes hacen grandes aportes a nivel físico y psicomotor al fortalecer la totalidad de las cualidades físicas y coordinativas, además de las habilidades luctatorias, a nivel cognitivo en la adquisición de elementos culturales, el conocimiento de conceptos y el desarrollo de la capacidad de análisis y respuesta, a nivel socioafectivo la socialización, la liberación controlada de la energía y agresividad lo que permite descargar tensiones, la asimilación del contacto como un hecho natural, a nivel ético el respeto, la empatía al reconocer el daño físico y emocional que puede ser causado y sufrido, el honor, la disciplina y todas las características inherentes a las artes marciales.
Son importantes los beneficios que pueden adquirir los estudiantes a partir de un aprendizaje de los deportes de combate, en diferentes campos de desarrollo humano. Consecuentemente, lejos de una connotación de violencia, la puesta en práctica de actividades enfocadas al desarrollo de las habilidades luctatorias permite consolidar una personalidad recta, serena y pacífica.
Otra de las características que poseen estos deportes, es que se dan en el contexto y la cultura propios de un grupo social, lo que repercute en el conocimiento de otras tradiciones a partir de la práctica de deportes específicos propios de algunos lugares del mundo, facilitando la interacción entre sujetos y culturas. Estas prácticas tienen una relación de comunicación física y social que facilitan las interacciones y aprendizaje; de acuerdo a lo anterior:
Una característica fundamental y propia de las actividades de lucha es la de que las acciones – aunque controladas-, van dirigidas al cuerpo del adversario y/o compañero. Este es un hecho de vital trascendencia para entender cómo los enfrentamientos ritualizados pueden contribuir a educar mediante ese diálogo con la agresividad aspectos relacionados con la no violencia y el pacifismo. El judo es una de las luchas que más ha evolucionado en la transformación de esa energía, con cierta carga agresiva, es un producto sutil y altamente formativo capaz de comulgar con los principios más avanzados de la educación física moderna.
Estas prácticas al ser propias de un contexto específico requieren de un posicionamiento en el ámbito educativo para que cumplan con su función social y formativa, dicho esto, es indispensable la preparación docente en estos deportes para el proceso de enseñanza-aprendizaje en el ámbito educativo. La adopción de estas prácticas combativas en nuestro contexto permite el aprovechamiento de las mismas la adquisición de sus beneficios físicos, cognitivos y axiológicos.