dc.description.abstract | En el 2018 ha resurgido el debate sobre el lenguaje inclusivo. Nuevamente, las y los universitarios chilenos se han movilizado para dar voz y vida, esta vez, a una nueva versión del movimiento feminista. En los petitorios se ha demandado el uso de un "lenguaje inclusivo", en particular, no sexista. Estamos, sin duda, viviendo transformaciones sociales y culturales notables que problematizan la construcción de la identidad a partir de sistema formal binario hombre-mujer. Como plantean Stahlberg, Braun, Irmen y Sczesny (2007), el debate sobre una lengua no sexista no es un tema actual, sino que se ha sostenido por más de treinta años y convoca no solo a la lingüística sino también a disciplinas de las ciencias sociales tales como la sociología, la antropología, la etnografía, entre otras. Valdivia (2019) señala que la cuestión del lenguaje inclusivo "trata de políticas de identidad que atraviesan y cuestionan esencialismos basales de nuestras sociedades patriarcales. Es la demanda por el derecho de ser nombrada y, por lo tanto, de existir. Esto en el entendido del poder y potencia constructiva y performática del lenguaje". | |