dc.description.abstract | La necesidad de integrar y armonizar la iniciación a la lectura en niños y niñas
de nuestra educación chilena, se constituye en un desafío que implica la
actualización de nuevos recursos y estrategias que desarrollen cambios
importantes en los párvulos en su nivel de maduración y adquisición de los
aprendizajes.
La comunicación, por tanto, constituye un proceso central y fundamental, a
través del cual los niños y las niñas desde los primeros años de vida, van
intercambiando y construyendo significados con quienes rodean su entorno más
próximo.
El aprendizaje de la lectura se inicia de forma progresiva, en la medida los
párvulos desarrollen una conciencia y apropiación de las distintas formas del
lenguaje; que las experiencias y estrategias sean de calidad, logrando así una
diversificación en la interacción que tengan con su entorno, mejorando y
ampliando las conversaciones, las lecturas de cuentos, el jugar a leer, escuchar
narraciones, reproducir rimas, interrogar textos con sentido para ellos y
participar en ambientes letrados.
En la medida en que se enriquezcan las posibilidades para desarrollar la
práctica comunicativa de niños y niñas, a través del uso progresivo y
adecuado, de las diferentes expresiones lingüísticas orales y escritas, se
alcanzarán mayores niveles de comunicación y representación. | |