Trabajo de grado - Maestría
Epidemiología y descripción de costo de pacientes quemados admitidos a una clínica de referencia de la Región Caribe colombiana en el periodo 2009 a 2018
Registro en:
Corporación Universidad de la Costa
REDICUC - Repositorio CUC
Autor
Luque Narváez, Luis
Pérez Sánchez, Reinaldo
Institución
Resumen
Burns are a global public health problem and cause around 265,000 deaths a year, most of
which occur in low- and middle-income countries. In many high-income countries, burn
death rates have been declining and the infant mortality rate is currently more
seven times higher in low- and middle-income countries than in high-income countries.
Burns are among the leading causes of disability-adjusted life-loss in low- and middleincome countries. In 2004, nearly 11 million people around the world suffered burns severe
enough to require medical attention. Worldwide, more than 95% of burns fire or flame
occur in low- and middle-income countries. However, most research, investments,
advances in the treatment of prevention initiatives come from high-income countries, which
has allowed them to reduce their morbidity. In Colombia, few burn studies have been
conducted in the general population and in the paediatric population. A study published by
Aldana and Navarrete shows that departments with the highest number of burn deaths in the
paediatric age are in Bogota, Antioquia, Valle del Cauca, Atlántico and Santander. These 5
departments account for about half of those killed across the country, and Atlantic has the
highest mortality rate. Prevention is the key to reducing the morbidity associated with
burns. In this way, it is necessary to establish reliable statistical data determine the most atrisk groups, characteristics and regions; in addition to designing and implementing effective
and impactful interventions on the paediatric population and in responsible for childcare, in
order to generate prevention programmes. That's why the problem question corresponds to
the one described below. Las quemaduras constituyen un problema de salud pública a nivel mundial y provocan
alrededor de 265.000 muertes al año, de las cuales la mayoría se produce en los
países de ingreso bajo y mediano. En muchos países de ingreso alto, las tasas de muertes
por quemaduras han ido disminuyendo y la tasa de mortalidad infantil es actualmente más
de siete veces más elevada en los países de ingreso bajo y mediano que en los de ingreso
alto. Las quemaduras se cuentan entre las principales causas de pérdida de años de vida
ajustados en función de la discapacidad en los países de ingreso bajo y mediano. En 2004,
casi 11 millones de personas de todo el mundo sufrieron quemaduras lo suficientemente
graves para requerir atención médica. En el mundo, más del 95% de las quemaduras
debidas a fuego o llamas ocurren en países de bajos y medianos ingresos. Sin embargo, la
mayoría de las investigaciones, las inversiones, los adelantos en el tratamiento de
quemaduras y las iniciativas de prevención provienen de países de altos ingresos, lo que les
ha permitido disminuir su morbimortalidad. En Colombia, se han realizado pocos estudios
de quemaduras en población general y en población pediátrica. Un estudio publicado por
Aldana y Navarrete muestra que los departamentos con mayor número de muertes por
quemaduras en la edad pediátrica corresponden a Bogotá, Antioquia, Valle del Cauca,
Atlántico y Santander. Estos 5 departamentos representan cerca de la mitad de los
fallecidos en todo el país, y Atlántico presenta la mayor tasa de mortalidad. La clave para
disminuir la morbimortalidad asociada a las quemaduras es la prevención. De este modo, es
necesario establecer datos estadísticos confiables que determinen los grupos, características
y regiones de mayor riesgo; además de diseñar e implementar intervenciones efectivas y de
impacto en la población pediátrica y en los responsables del cuidado de los niños, con la finalidad de generar programas de prevención. Es por lo que la pregunta problema corresponde a la que se describe a continuación.