La valorable experiencia realizada con personal docente y no docente, administrativos de sede y toda la comunidad universitaria hicieron posible el inicio de las clases el 01 de abril en la modalidad virtual. Se propone recopilar y sistematizar las adaptaciones al trabajo remoto y la digitalización de los procesos administrativos, así como también el seguimiento y asistencia en la conectividad a los estudiantes y el acompañamiento continuo a los docentes en la adaptación a la enseñanza en la modalidad virtual, y a las sedes y subsedes académicas. La evaluación de los obstáculos y dificultades, así como de los logros y superaciones de esta experiencia hará posible la adopción de manera permanente, aun en el retorno a la presencialidad, no sólo de las actividades académicas sino también las de gestión y apoyo administrativo, de la mayoría de los dispositivos de emergencia adoptados para sostener el proceso de enseñanza aprendizaje. La puesta en marcha del Sistema de Educación a Distancia con la gran curva de aprendizaje lograda en este período extraordinario es el desafío asumido para el ciclo lectivo 2022, con inscripción abierta en dos CCC bajo esta modalidad, así como la adopción de modelos híbridos a definir e implementar en el resto de la oferta educativa.