Thesis
Manejo de un paciente canino con enfermedad inflamatoria intestinal
Autor
Reyes Bolívar, Cristhiam Fair
Resumen
La diarrea crónica en el perro puede ser visto como un reto diagnóstico, gracias a las múltiples etiologías que puede llegar a tener. Entre esas, resalta la enfermedad inflamatoria intestinal, la cual a través del tiempo, ha ganado importancia en la clínica diaria de las veterinarias. Aun así puede ser que su presencia no sea tan alta, en comparación con el resto de causas de diarrea en el perro (Sainz, 2013).
La enfermedad inflamatoria intestinal se considera un conjunto de patologías de curso inflamatorio crónico cuya etiología es idiopática y pueden llegar a afectar diferentes zonas del tracto digestivo. Los signos clínicos, como son el vómito, diarrea, pérdida de peso o alteraciones en el apetito, se deben a los procesos inflamatorios e infiltrados celulares en la mucosa que dan lugar a una disfunción de los enterocitos. El proceso inflamatorio se denomina sobre la base del tipo de infiltrado predominante presente en la lámina propia, entre los que se encuentran, por orden de frecuencia, enteritis linfoplasmocitaria, que se caracteriza por la presencia de linfocitos y células plasmáticas; enteritis eosinofílica, cuyo infiltrado está compuesto por eosinófilos, y enteritis neutrofílica, en caso que el infiltrado esté compuesto en su mayoría por neutrófilos.
El diagnóstico de la enfermedad inflamatoria intestinal, debe cumplir con un protocolo de diagnósticos diferenciales previos, unido a la realización de una biopsia intestinal que muestre el tipo de infiltrado inflamatorio intestinal.
Palabras clave: Diarrea, enfermedad inflamatoria intestinal, idiopática, enteritis, linfoplasmocitaria, eosinofílica, neutrofílica, biopsia La diarrea crónica en el perro puede ser visto como un reto diagnóstico, gracias a las múltiples etiologías que puede llegar a tener. Entre esas, resalta la enfermedad inflamatoria intestinal, la cual a través del tiempo, ha ganado importancia en la clínica diaria de las veterinarias. Aun así puede ser que su presencia no sea tan alta, en comparación con el resto de causas de diarrea en el perro (Sainz, 2013).
La enfermedad inflamatoria intestinal se considera un conjunto de patologías de curso inflamatorio crónico cuya etiología es idiopática y pueden llegar a afectar diferentes zonas del tracto digestivo. Los signos clínicos, como son el vómito, diarrea, pérdida de peso o alteraciones en el apetito, se deben a los procesos inflamatorios e infiltrados celulares en la mucosa que dan lugar a una disfunción de los enterocitos. El proceso inflamatorio se denomina sobre la base del tipo de infiltrado predominante presente en la lámina propia, entre los que se encuentran, por orden de frecuencia, enteritis linfoplasmocitaria, que se caracteriza por la presencia de linfocitos y células plasmáticas; enteritis eosinofílica, cuyo infiltrado está compuesto por eosinófilos, y enteritis neutrofílica, en caso que el infiltrado esté compuesto en su mayoría por neutrófilos.
El diagnóstico de la enfermedad inflamatoria intestinal, debe cumplir con un protocolo de diagnósticos diferenciales previos, unido a la realización de una biopsia intestinal que muestre el tipo de infiltrado inflamatorio intestinal.