Tesis de maestría
Después de la República española: México y su callada relación con el franquismo (1936-1977)
Registro en:
171362.pdf
Autor
Delgado Romero, Yancarlo Emmanuel
Resumen
Esta tesis de maestría aborda la historia de las relaciones oficiosas entre México y España durante un momento muy específico, 1939-1977, en la historia diplomática de ambos países. Debido a la complejidad de su caso, existe una incapacidad por precisar el enfoque que orientó la realización de este trabajo. La teoría de las Relaciones Internacionales, la historia diplomática, la teoría política y el Derecho Internacional no cuentan con un caso precedente que se le compare. El 17 de julio de 1936, el ejército español realizó un golpe de Estado contra el gobierno de la Segunda República española. Rápidamente el levantamiento militar se convirtió en una cruenta guerra civil que enfrentó al pueblo español por los siguientes tres años. La contienda tuvo por resultado el triunfo del bando rebelde, instaurándose en España una dictadura personalista encabezada por el general Francisco Franco. Ante el conflicto, el gobierno de México, entonces presidido por el general Lázaro Cárdenas (1934-1940), brindó su apoyo a la defensa republicana desde el inicio de la guerra. Amparado en la naturaleza legal del régimen republicano, Cárdenas decidió no reconocer diplomáticamente al nuevo gobierno instalado en Madrid, sentando el precedente del desconocimiento a la dictadura franquista que habrían de mantener los siguientes presidentes mexicanos hasta el restablecimiento de la vida democrática con la celebración de elecciones generales en 1977. En un sentido oficial, México no sostuvo relaciones diplomáticas con España por espacio de treinta y ocho años (1939-1977). A lo largo de todo este tiempo, el gobierno mexicano se negó en establecer relaciones formales con la dictadura del general Franco. Por la parte de España, sin embargo, el interés de su política exterior colocó a México como uno de sus principales objetivos. En ese sentido, la diplomacia franquista buscó con relativo éxito sostener encuentros no oficiales con las autoridades mexicanas, esperando allanar el camino a un futuro reconocimiento. La reducida pero existente relación económica supone un éxito limitado de la política exterior franquista, estableciendo sólo una relación no oficial que habría de extenderse hasta la reanudación diplomática de 1977. Este trabajo corresponde a un intento por tratar de explicar esta compleja relación.