| dc.description.abstract | La presencia de contaminantes emergentes (CE) recientemente identificados en los
recursos hídricos es motivo de preocupación para la salud y seguridad del ambiente.
Las plantas convencionales de tratamiento de aguas residuales no están diseñadas
para eliminar CE. Éstos comprenden productos farmacéuticos, de cuidado personal,
cosméticos, aditivos industriales, plastificantes, plaguicidas y compuestos químicos
que, aunque se encuentran en bajas concentraciones, son capaces de alterar las
funciones endocrinas de organismos acuáticos y generar bacterias resistentes. El
desconocimiento de efectos ecotoxicológicos en animales, plantas y humanos, y la
falta de regulación es motivo de preocupación. El objetivo de este trabajo fue evaluar
la eficiencia de remoción de CE en un proceso de biofiltración con cama orgánica en
aguas residuales municipales variando la carga hidráulica superficial (CHS) tal que los
efluentes cumplan con criterios normativos de descarga. Los CE evaluados fueron la
carbamazepina (CBZ), gemfibrozil (GFZ) y trimetoprim (TMR) en tres biofiltros: con
aire (BA), un sistema hibrido aire-sin aire (BSH) y un tercero sin aire (BSA), con CHSs
de 0.82 y 1.07 m³m²d‾¹. Los CE se analizaron mediante la técnica de cromatografía
líquida acoplada a espectrometría de masas (CL-EM) para su detección y
cuantificación. Los biofiltros resultaron ser eficientes en la remoción del TMP en 69, 70
y 69% en los BA, BSH y BSA, respectivamente. El GFZ no fue detectado en influentes
por estos métodos. La CBZ fue identificada en los influentes más no en los efluentes
del sistema. Se concluye que los biofiltros orgánicos empacados con astillas de
mezquite remueven CE. | |
