Artículo
Detección de vaginosis citolitica en mujeres asistidas en centros de atención primaria de la salud sur de la ciudad de Corrientes Argentina 2017
Fecha
2017-07-01Registro en:
Elizalde Cremonte, Alejandra, et. al., 2017. Detección de vaginosis citolitica en mujeres asistidas en centros de atención primaria de la salud sur de la ciudad de Corrientes Argentina 2017. Revista Centroamericana de Obstetricia y Ginecología. Guatemala: Federación Centroamericana de Asociaciones y Sociedades de Obstetricia y Ginecología, vol. 22, no. 3, p. 46-49. ISSN 0428-0911.
0428-0911
Autor
Elizalde Cremonte, Alejandra
Espinoza, Natalia G.
Cataldi, Selene M.
Cristaldo, Fernando V.
Nocentti, Bruno J.
Institución
Resumen
El Lactobacillus es considerado una bacteria comensal, cuya
presencia es un factor protector en la vagina. Sin embargo,
se han registrado y descrito casos en la literatura médica,
de mujeres con un aumento significativo de Lactobacillus, lo
que se conoce como lactobacilosis. Esta condición provoca
una acidificación extrema del medio vaginal, lo cual puede
llevar a la consecuente lisis de las células epiteliales. Esta
entidad patológica se conoce como Vaginosis Citolítica (VC)
y generalmente se confunde con la vulvovaginitis-micótica
por Cándida albicans (1,2). Generalmente se presenta en las
mujeres en edad reproductiva, y el cuadro clínico se evidencia
durante la fase postovulatoria, desapareciendo con la
menstruación (1,3). La flora habitual de la vagina está dominada
por el Lactobacillus spp en bajo número (cinco bacilos por diez
células escamosas), pero los microorganismos mencionados
están presentes solos, sin respuesta celular inflamatoria. En
mujeres asintomáticas son considerados como flora normal
y en esta proporción son considerados como factor de
protección para la candidiasis vaginal (2,4). Las manifestaciones
clínicas asociadas a la vaginosis citolítica o lactobacilosis,
son semejantes a las que se producen en la vulvovaginitis
candidiásica, pero se diferencia de ella por la presencia de
abundantes lactobacilos, ausencia o escasez de leucocitos y
ausencia de Trichomonas, Gardnerella o Candida, y evidencia
de citólisis debido a la acidez exagerada que se produce, con
un pH menor a 4 (1, 2, 5). Los signos y síntomas son: ardor y/o
comezón vulvar, irritación de la mucosa vaginal, leucorrea
o aumento del flujo vaginal con aspecto de leche cortada;
cuando la vaginosis progresa causa vulvodinia, llevando a la
dispareunia de entrada, es decir, dolor, principalmente en el
introito y disuria (1, 2, 3, 4, 5). Durante el examen físico se puede
observar en la vulva signos de eritema y edema, además
de una cantidad variable de secreción blanca en el introito
vaginal (1,2). Para el diagnóstico de vaginosis citolítica se debe
considerar que las manifestaciones clínicas son semejantes
a las de candidiasis recurrente en varios ciclos menstruales,
el uso de medicamentos antimicóticos que no hayan surtido
efecto y el examen de secreción vaginal correspondiente