Artículo de revista
La teoría de las élites y la lucha de la clase global.
Fecha
2019-01-01Registro en:
10.14718/SoftPower.2019.6.1.4
2539-2239
2389-8232
Autor
Azzolini, Giulio
Institución
Resumen
Al acabar la Guerra Fría y derrumbarse la Unión Soviética, se difundió la tesis de que había finalizado la época de la clase y, aún más, la lucha de clase. En este ensayo nos proponemos hacer algunas consideraciones sobre el problema que Luciano Gallino llamaba “la lucha de clase desde arriba”. El período histórico considerado es aquel que empezó en los años setenta del siglo XX como resultado de una voluntad política neoliberista. La perspectiva científica empleada se relaciona con la teoría de la élite en sentido lato. En primer lugar, el ensayo intenta aclarar las ventajas que este enfoque podría facilitar a la hora de redefinir la cuestión general de la lucha de clase. En segundo lugar, se centra en las formas de subjetivación de las minorías organizadas en la “clase capitalista transnacional”. En tercer lugar, traza las principales formas de poder ejercidas por las minorías capitalistas organizadas, enfocándose sobre todo en lo que Charles Lindblom definió “poder estructural”. Finalmente, muestra cómo y porqué el poder estructural es causa y efecto de la erosión de los “espacios políticos” que ordenaron el mundo moderno hasta los llamados “Treinta gloriosos”. After the end of the Cold War and the collapse of the Soviet Union, the thesis that the class age was over and, even more so, the class struggle has spread. In this essay I propose to make some considerations on the problem of what Luciano Gallino called “the class struggle from above”. The historical period taken in consideration is the one that began in the seventies of the twentieth century, as a result of a neoliberal political will. The scientific perspective adopted is connected with the elite theory, understood in a broad sense. The essay first of all attempts to clarify the advantages that such an approach could bring to a redefinition of the general question of the class struggle. Secondly, it focuses on the manners of subjectivation by the organized minorities within the “transnational capitalist class”. Thirdly, it illustrates the main forms of power exercised by the organized capitalist minorities, with particular attention to what Charles Lindblom called “structural power”. Finally, it shows how and why structural power is both cause and effect of the erosion of the “political spaces” that ordered the modern world, up to the so-called “Thirty glorious”.