Thesis
Trastornos del metabolismo mineral óseo en pacientes con enfermedad renal crónica, en programa de hemodiálisis en el Instituto del Riñón y Diálisis San Martín, INRIDI entre los años 2014 y 2016
Fecha
2017Autor
Cedeño Hermida, Kevin Paúl
Institución
Resumen
Cerca del 10% de toda la población mundial aproximadamente padece de enfermedad renal crónica, cifra que ha alcanzado hasta el 50% en la población geriátrica esto debido a la evolución misma de la enfermedad. Los trastornos del metabolismo mineral óseo hacen referencia a todas las alteraciones bioquímicas, esqueléticas y calcificaciones extra esqueléticas que ocurren consecuencia de las alteraciones del metabolismo mineral en la enfermedad renal crónica. Esta entidad clínica se denomina (Chronic Kidney disease mineral and bone disorder). Se manifiesta por una o la combinación de las siguientes manifestaciones:
Anormalidades de la regulación del calcio, fosfato, hormona paratiroidea, vitamina D Alteraciones en el remodelado, mineralización, volumen, crecimiento o fragilidad del esqueleto. Calcificaciones vasculares o de otros tejidos blandos.
Como consecuencia de estas alteraciones se producirá un daño en los tejidos diana. El esqueleto y el sistema cardiovascular son los tejidos principalmente afectados. Las calcificaciones de tejidos blandos y la calcifilaxis son también complicaciones de gran importancia, pues se asocian con un aumento importante de la morbimortalidad de los pacientes con ERC. La hormona paratiroidea (PTH) se ha considerado clásicamente como una toxina urémica y se ha asociado con distintos efectos sistémicos. Más recientemente, ha adquirido importancia el déficit de vitamina D, también frecuente en la población general, que se asocia a alteración inmunorregulación, respuesta inflamatoria, regulación de proliferación celular, secreción de insulina y producción de renina. Además, la 25(OH) D (calcidiol) tiene una acción directa sobre el metabolismo óseo y es sustrato para la generación de calcitriol. Como consecuencia de estos efectos, las alteraciones del metabolismo mineral han demostrado, en la población urémica, ser predictoras independientes de mortalidad, especialmente de causa cardiovascular. About 10% of the entire world population suffers from chronic kidney disease, a figure that has reached up to 50% in the geriatric population due to the very evolution of the disease. Disorders of bone mineral metabolism refer to all biochemical, skeletal, and extra-skeletal calcifications that occur as a consequence of alterations in mineral metabolism in chronic kidney disease. This clinical entity is called (Chronic Kidney disease mineral and bone disorder). It is manifested by one or the combination of the following manifestations:
• Abnormalities of the regulation of calcium, phosphate, parathyroid hormone, vitamin D.
• Alterations in the remodeling, mineralization, volume, growth or fragility of the skeleton.
• Vascular or other soft tissue calcifications.
As a consequence of these alterations, damage will occur in the target tissues. The skeleton and cardiovascular system are primarily affected tissues. Soft tissue calcifications and calciphylaxis are also major complications, as they are associated with a significant increase in the morbidity and mortality of patients with CKD. Parathyroid hormone (PTH) has been classically considered as a uremic toxin and has been associated with different systemic effects. More recently, vitamin D deficiency, also prevalent in the general population, has become important, associated with immunoregulatory alteration, inflammatory response, regulation of cell proliferation, insulin secretion, and renin production. In addition, 25 (OH) D (calcidiol) has a direct action on bone metabolism and is a substrate for the generation of calcitriol. As a consequence of these effects, alterations of mineral metabolism have been shown in the uremic population to be independent predictors of mortality, especially of cardiovascular cause.