Minimally processed tropical pumpkin (Cucurbita moschata) has considerable potential to create new value-added market opportunities for Puerto Rico. The aim of this work was to evaluate the quality and microbiological changes of minimally processed tropical pumpkin packed in low-density polyethylene (LDPE) bags and stored for 20 days. Pumpkin pieces approximately 2 cm3 in size were obtained from two cultivars (Taina Dorada' and 'Soler'). Pieces were immersed in an antimicrobial solution containing citric acid (0.2%) and sodium benzoate (0.1%) for 3 min, centrifuged in a salad spinner, packed in LDPE bags with either vacuum or non-vacuum packaging, and stored at 4° C ± 2 for a period of 20 days. There were minimum effects of storage time on the chemical and physical characteristics of the pumpkin pieces. The percentage of O2 decreased continuously in non-vacuum packaging while the percentage of CO2 increased within the first 72 hours of storage. A sensorial panel judged pumpkin pieces stored for a period of 20 days to be of acceptable quality. A minimally processed product based on pumpkin treated with an antimicrobial solution, packed in LDPE bags (either vacuum or non-vacuum packaging) and stored for 20 days at 4° C ± 2 presented safe microbiological levels and acceptable quality for the consumer.La calabaza (Cucurbita moschata) mínimamente procesada tiene un potencial considerable para crear nuevas oportunidades en el mercado de valor agregado en Puerto Rico. El objetivo de este trabajo fue evaluar la calidad y microbiología de la calabaza tropical mínimamente procesada empacada en bolsas de polietileno de baja densidad (LDPE, por sus siglas en inglés) y almacenada durante 20 días. Pedazos de 2 cm3 de dos cultivares de calabaza ('Taina Dorada' y 'Soler') fueron tratados por inmersión con una solución antimicrobiana que contenía ácido cítrico (0.2%) y benzoato de sodio (0.1%) durante 3 min, centrifugados en una hilandera de ensaladas, empacados en bolsas de LDPE, sellados al vacío y sin vacío, y almacenados a 4° C ± 2 durante un período de 20 días. El tiempo de almacenamiento tuvo un efecto mínimo sobre las características químicas y físicas de los pedazos de calabaza. El contenido de O2 en los empaques sellados sin vacío disminuyó, mientras que el contenido de CO2 tuvo un incremento en las primeras 72 horas de almacenamiento. Los jurados del panel sensorial determinaron que la calabaza almacenada por 20 días mantiene una calidad aceptable. El producto mínimamente procesado tratado con una solución antimicrobial, empacado en bolsas de LDPE (selladas al vacío o sin vacío) y almacenado por 20 días a 4° C ± 2 presentó niveles microbiológicos seguros y una calidad aceptable por el consumidor.