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Geographical and seasonal distribution of the coconut mite, Aceria guerreonis (Acari: Eriophyidae), in Puerto Rico and Florida, USA
Distribución geográfica y estacional del ácaro del coco en Puerto Rico y Florida
Registro en:
10.46429/jaupr.v74i3.6656
Institución
Resumen
The coconut mite, Aceria guerreronis Keifer, was collected for the first time in Puerto Rico in 1977. It was reported for the first time in Florida in 1984, although it may have been present in the state since the 1950s. On the basis of damage symptoms observed during 1986-87, the coconut mite was distributed in almost all plantings of coconut in Puerto Rico. The percentage of trees with symptoms was highest on the west coast, where planting density is highest. During the same period, the percentage of coconut palms infested with coconut mites varied from 66 to 98% at different sites on the Florida Keys. On the Florida mainland, the percentage of trees with coconut mite damage was usually less than 7%. At several sites on the Florida mainland revisited in 1988, coconut mites had spread locally. At Playa Tres Hermanos in Añasco, Puerto Rico, and Bahía Honda Key, Florida, where monthly sampling was conducted, coconut mite population fluctuations did not appear to be strongly associated with dry and wet periods or mean daily temperatures. A list of mite species associated with the coconut mite was reported. It included four species reported for the first time in Puerto Rico. In Puerto Rico, Bdella distincta preyed on both coconut mite and Steneotarsonemus furcatus. In Florida, Amblyseius largoensis, Neoseiulos mumai, and N. paspalivorus were observed preying on coconut mites. However, these predators apparently do not significantly affect coconut mite populations. Tarsonemus sp. inflicted damage on the coconut similar to that caused by the coconut mite. Coconut mites beneath tepals of coconuts exposed to —1.5° C for 5.5 hours were not affected adversely by this treatment. Some eggs remained viable after exposure to —3° C up to 5 hours. Coconut mites survived at 5° C for 10 days. Thus, coconut mites are capable of surviving most winters on the Florida mainland. El ácaro del coco, Aceria guerreronis Keifer, se encontró por primera vez en Puerto Rico en 1977; se registró por primera vez de Florida en 1984, aunque pudo haber estado presente desde la decada de los 50. Según los síntomas de los daños observados en 1986-87, el ácaro del coco estaba distribuido en casi todos los cocoteros en Puerto Rico. El porcentaje de las palmas con los síntomas fue más alto en la costa occidental, donde la densidad de la plantación fue más alta. Durante el mismo período, el porcentaje de cocoteros infestados con este ácaro varió de 66 a 98 % en diferentes sitios en los cayos de Florida. En la tierra firme de Florida, el porcentaje de las palmas con daños del ácaro usualmente fue menos de 7%. En varios sitios en la tierra firme de Florida, los cuales se volvieron a visitar en el 1988, la distribución del ácaro del coco se había extendido. En playa Tres Hermanos, Puerto Rico, y Cayo Bahía Honda, Florida, se hizó un muestreo mensual de los ácaros; las fluctuaciones de poblaciones no parecían estar asociadas ni con los períodos de sequía ni con los períodos de lluvia, ni aumentaron con relación a las altas temperaturas del verano. Se presenta una lista de los ácaros asociados con el ácaro del coco en ambas localidades y se informan por primera vez cuatro especies para Puerto Rico. En Puerto Rico, Bdella distincta se encontró alimentándose del ácaro del coco y de Steneotarsonemus furcatus. En Florida, se observaron Amblyseius largoensis, Neosetulus mumai y N. paspalivorus depredando el ácaro del coco. Estos depredadores aparentemente no afectaron significativamente las poblaciones del ácaro. Tarsonemus sp. aparentemente causó daños semejantes al ácaro del coco en la etapa inicial de infestación. A los ácaros del coco debajo de los tépalos del coco expuestos a —1.5° C. por 5.5 horas aparentemente no los afectó adversamente este tratamiento. Unos huevos permanecieron viables después de estar expuestos a —3° C por 5 horas. Los ácaros sobrevivieron a 5° C por 10 días. Esto demostró que el ácaro es capaz de sobrevivir la mayoría de los inviernos en Florida.