doctoralThesis
Uso profiláctico de esteroides en niños con cardiopatías congénitas, operados con apoyo de circulación extracorpórea. Estudio clínico controlado.
Autor
Fernández Gonzalez, Hungría
Institución
Resumen
El beneficio del uso de corticosteroides, con el fin de reducir las complicaciones asociadas con la respuesta inflamatoria sistémica, desencadenada en niños con cardiopatías congénitas (CC), durante la cirugía cardíaca bajo circulación extracorpórea (CEC), continua siendo un
tema controversial a pesar de su introducción en la práctica clínica desde hace seis décadas. Pacientes y Métodos: Estudio clínico controlado, prospectivo, aleatorio, doble ciego, realizado en 104 niños (edad 06 meses a 8 años) con CC complejas, ASA III, dirigido a evaluar el impacto de la administración de MPS 30mg/kg iv (n 63), en la modulación del estrés quirúrgico en comparación con un grupo placebo (n 41). Inclusión: Todos los niños de 6 meses a 8 años, programados para cirugía bajo CEC, mayo 2010 a mayo 2011. Consentimiento informado. Exclusión: asma bronquial, insuficiencia adrenal, infecciones, tratamiento previo con esteroides o inmunosupresores. Parámetros basal y a las 24 horas del post-operatorio (PO): leucocitosis, interleuquina 6 (IL-6), proteína C reactiva (PCR), cortisol sérico y glicemia en ayunas. Evolución clínica: duración de la ventilación mecánica (VM),
estancia en UCI, requerimiento de inotrópicos, hemoderivados, sangrado, días en
hospitalización e incidencia del síndrome de respuesta inflamatoria sistémica (SRIS), falla multiorgánica (FMO), síndrome de bajo gasto (SBG), disfunción ventricular y síndrome de fuga capilar (SFC).Protocolos de anestesia general balanceada y perfusión homogéneos, se utilizó bombas de rodillo, oxigenadores de membrana y hemoderivados leucodepletados. No se administró insulina, aprotinina, ni etomidato. Resultados: Homogénea distribución de ambos grupos de tratamiento por tipo de CC (cianógenas y no cianógenas), con similar riesgo quirúrgico y características peri-operatorias. La incidencia del SRIS fue del 34%, FMO 26%,
SBG 15%, SFC14%, sin diferencia entre los grupos CTR y MPS, lo cual indica que la MPS no se asoció a la reducción del riesgo a presentar complicaciones en el PO. No hubo diferencias entre los grupos CTR y MPS en la formula y recuento leucocitario a las 24h, pero si reducción de IL-6 y PCR, al 5to día se observó linfopenia más prolongada, lo cual sugiere modulación de la respuesta inflamatoria. La administración de MPS no se asoció a hiperglicemia, ni sangrado gástrico, con relación al CTR. Sin embargo fue mayor la incidencia de infecciones y el uso de antibióticos de alto espectro en el PO. El 63% de los pacientes tratados con MPS
respondió a las 24h del PO con reducción de la cortisolemia (MPS-RESPONDEDORES) (p
0,003), mientras que el 38% no respondió a la acción supresora hipofisiaria del esteroide
exógeno (MPS-NO RESPONDEDORES). Los pacientes del subgrupo MPS-NO RESPONDEDORES con relación al grupo CTR y subgrupo MPS-RESPONDEDORES, permanecieron mayor cantidad de horas con soporte inotrópico, ventilatorio, fue mayor la estancia en UCI y hospitalización y más elevado el riesgo a presentar SBG y falla cardiaca. Conclusiones: En nuestras condiciones, la pauta de administración de MPS 30 mg/kg iv durante la inducción anestésica, no fue eficaz en prevenir el SRIS, FMO, SBG, SFC, ni su uso
se asoció a mejor evolución clínica en el PO, lo contrario hubo mayor riesgo a presentar
infecciones en el PO y a permanecer hospitalizados más de 15 días.