dc.description | La problemática sobre personas que viven en situación de calle está presente en toda
América Latina, afectando de diversas formas en cada país, donde cada uno de ellos
responde de manera diferente a este problema según sus recursos. Según la Fundación
Gente de la Calle (1994), cuando nos referimos a personas en situación de calle, es
entendida como aquella que carece de residencia fija y que pernocta en lugares, públicos o
privados, que tienen las características básicas de una vivienda, aunque cumpla esa función.
Ahora bien, un estudio realizado en Santiago de Chile sobre personas en situación de calle,
esta situación no se da solamente por pobreza o falta de recursos, sino también por
exclusión y vulnerabilidad social, que claramente es ejercida por el entorno que los rodea
(Impacta, 2019).
En América Latina y el Caribe, todos los países cuentan con personas que viven en situación
de calle. Países como Chile, Brasil y Uruguay, cuentan con mayor información sobre las
dimensiones y características de las personas que viven en la calle. Por lo tanto, en otros
países la problemática no es tan conocida, no se cuenta con datos específicos y se siguen
realizando intervenciones puntuales y sin un adecuado acceso a programas o servicios que
respondan correctamente a las necesidades de las personas afectadas. Generalmente son
las fundaciones o instituciones religiosas que responden ante las necesidades de las
personas que viven en situación de calle, donde no siempre se cuenta con los recursos
necesarios (Programa EURO social, 2015).
En el caso de Chile 16.093 personas viven en situación de calle, donde un 15,6 %
corresponde a mujeres y un 84,4% a hombres. El promedio de tiempo en situación de calle
es de 5 años. (Ministerio de Desarrollo Social y Familia, 2020).
Continuando con los datos del catastro citado anteriormente se identificaron consumo de
sustancia por parte de las personas que se encuentran en situación de calle. El consumo de
alcohol, marihuana, pasta base y otras drogas. | |