Trabajo de grado - Pregrado
Evaluación de los problemas dermatológicos de origen infeccioso no viral de las tortugas hicoteas Trachemys sp. del Zoológico Jaime Duque
Autor
Fula Flórez, Ana Maria
Institución
Resumen
<p>Los principales problemas que padecen las tortugas en cautiverio, son los problemas dermatológicos siendo las especies semi-acuáticas son las más afectadas. Es por este que se realizó una evaluación de los problemas dermatológicos de origen bacteriano, fúngico y ectoparasitario de las tortugas Hicoteas (Trachemys sp.) del Zoológico Jaime Duque. Se realizó un análisis retrospectivo de todas las tortugas fallecidas entre el 2000 hasta el 2012 y un análisis de todas las tortugas que se encontraban en exhibición hasta el 2012. En los dos análisis se tuvo en cuenta en las historias clínicas, el examen clínico dermatológico al arribo, las lesiones y diagnósticos durante la estadía en el zoológico y todos los exámenes de laboratorio y tratamientos realizados en el periodo evaluado. Las necropsias y exámenes postmortem también entraron en el análisis retrospectivo. Se realizó una comparación de estos dos análisis para determinar la evolución de estos problemas a través del tiempo. En el análisis retrospectivo se obtuvo que, las lesiones más comunes eran ulceras y abscesos; los diagnósticos más comunes fueron “Enfermedad septicémica ulcerativa cutánea” (SCUD) y “Septicemia”, los dos en su mayoría en el año 2005; los exámenes realizados fueron cultivos con algunos antibiogramas, a partir del 2008 en su mayoría, estos resultados mostraron que el agente más aislado fue E.Coli seguido por Pseudomona sp y aureoginosa, y Proteus sp. todos resistentes a Trimetoprim Sulfa, Gentamicina, Enrofloxacina y Amoxicilina. Los tratamientos que se realizaron fueron poblacionales con antibióticos de amplio espectro como Enrofloxacina 10%, Oxitetraciclina, Trimetoprim Sulfa y Florfenicol; Siempre estuvieron en constante tratamiento profiláctico con soluciones yodadas o con Clorexidina. En el análisis de las tortugas en exhibición las lesiones más comunes fueron la eritematosis en su mayoría en el año 2011 y cicatrices en plastrón y caparazón; los diagnósticos más comunes fueron “Enfermedad ulcerativa del caparazón” y “Disecdisis”; a todas las tortugas se les realizo un hisopado (cultivo y antibiograma de aerobios y anaerobios y cultivo fúngico) y muestra de sangre (Cultivo anaerobio), los agentes aislados fueron: 5 de Citrobacter freundii, 2 de Klebsiella ozaena, 2 de Serratia liquefaciens, 1 de Sthaphyloccous aureus, 1 de Streptoccocus y 2 de Clostridium sp. Los 3 primeros todos fueron resistentes a Amoxicilina más Ácido Clavulánico y a Cefalexina. Todos los agentes aislados fueron sensibles a Ceftriaxone. Todos los cultivos fúngicos reportaron Cándida sp. Las tortugas que se encontraban desde el 2005 recibieron los mismos antibióticos reportados en las tortugas fallecidas pero a partir del 2008 se realizaron tratamientos individuales con Florfenicol oral y Enrofloxacina 5%. Los resultados obtenidos llevan a la conclusión que aunque desde el año 2000 han presentado problemas dermatológicos, han disminuido su cronicidad y nunca han presentado ectoparásitos; al realizar exámenes para determinar el agente causal se puede implementar un tratamiento específico y se deja como sugerencia estudiar las condiciones medio ambientales para apoyar la terapia antibiótica que se establezca.</p> The main problems that captive turtles face are skin problems, being semi-aquatic species the most affected. For this reason an evaluation of dermatological problems of bacterial, fungal and ectoparasite was made on the Hicoteas turtle (Trachemys sp.) of the Jaime Duque Zoo. We performed a retrospective analysis of all the turtles that died from 2000 to 2012 and an analysis of all turtles that were on display until 2012. In both analyses we took into account the medical, dermatological clinical examination on arrival, injuries and diagnoses during their time at the zoo and all laboratory tests and treatments performed in the evaluated period. The autopsy and post-mortem examinations also entered the retrospective analysis. A comparison of these two analyzes was realized to determine the evolution of these problems over time. In the retrospective analysis ulcers and abscesses were the most common injuries, the most common diagnoses were "septicemic ulcerative skin disease" (SCUD) and "septicemy" in the year 2005, cultures and antibiograms made in the year 2008 showed that the agent that was more isolated was E. coli followed by Pseudomonas sp and aeruginosa, and Proteus sp. all Sulfa Trimethoprim, gentamicin, enrofloxacin and amoxicillin resistants. The treatments were performed with broadspectrum antibiotics given to the entire population such as enrofloxacin 10%, oxytetracycline, trimethoprim sulfa and Florfenicol; they were always constantly prophylactic iodine or chlorhexidine solutions applied to the animals. In the analysis of the turtles on display the most common injuries were mostly erythematosus in 2011 and scarring plastron and carapace, the most common diagnoses were "ulcerative shell disease" and "Disecdisis", all turtles were swabbed (culture and sensitivity of aerobic and anaerobic and fungal culture were done with the swabs) and blood samples were taken (for anaerobic culture), isolated agents were: 5 of Citrobacter freundii, 2 of Klebsiella ozaena, 2 of Serratia liquefaciens, 1 of Sthaphyloccous aureus, 1 of Streptococcus sp. and 2 of Clostridium The first 3 all were resistant to amoxicillin as also to clavulanate and cephalexin. All viral isolates were sensitive to ceftriaxone. All fungal cultures reported Candida sp. The turtles that were in the zoo since 2005 received the same antibiotics that were given to reported dead turtles. Treatments changed since 2008 individual treatments were performed with oral Florfenicol and Enrofloxacin 5%. The results lead to the conclusion that although since 2000 dermatological problems have occurred, these illnesses have reduced their chronicity and turtles have never presented ectoparasites. When diagnose tests are performed to determine the causal agent, it gives the clinician the opportunity to implement specific treatment and can help give suggestions on studying the environmental conditions that can affect the established antibiotic therapy.