El agua superficial utilizada para el riego de los cultivos agrícolas puede contener diversos patógenos, los cuales representan un riesgo de contaminación para las frutas y hortalizas que están en contacto con el agua contaminada. La presencia de microorganismos patógenos sobre frutas y hortalizas frescas afecta su inocuidad, repercutiendo en problemas de salud humana, que se ve reflejado en una alta incidencial de brotes diarreicos y en ocasiones intoxicaciones con implicaciones clínicas, sobre todo en aquellas personas que tienen contacto directo con estos productos. En los últimos diez años, Crystoporidium y Giardia han adquirido gran importancia por ser patógenos transmitidos por el agua, ser resistentes a los productos comúnmente templados para la desinfección, requerir bajas dosis para inducir la infección; así como, poder sobrevivir por largos períodos de tiempo en agua superficial y superficie de productos agrícolas. En México, pocos estudios se han llevado a cabo para determinar la presencia de Crystoporidium y Giardia en agua superficial de uso agrícola y para el lavado de hortalizas frescas. Tampoco existe información que nos permita conocer la presencia de Crystoporidium y Giardia en tinas de lavado de empaques agrícolas y su posible adherencia a la superficie de hortalizas. El propósito del presente estudio fue cuantificar los ooquistes de Crystoporidium y quistes de Giardia en agua de riego del Valle de Culiacán, su presencia en empaques agrícolas que utilizan esta agua superficial para lavado y desinfección de hortalizas; así como, determinar la capacidad in vitro de los ooquistes de Crystosporidium parvum de permanecer sobre la superficie de frutos de tomate (Lycopersicum esculentum Mill.). Se utilizaron tres concentraciones de ooquistes (10,000, 1,000 y 100 ooquistes / L); dos concentraciones de cloro (100 y 300 ppm) y dos niveles de turbidez (2 y 100 NTU) simulando condiciones de empaques agrícolas, en tinas de lavado y espreas.