Proyectos
Gira de captura en tecnologías de producción agrícola orgánica a Cuba
Autor
[ejecutor y ejecutor técnico] Instituto de Investigaciones Agropecuarias, CRI Quilamapu, VIII Región
[coordinador principal y participante individual] María Cecilia Céspedes León
[institución visitada] Instituto de Ciencia Animal, Instituto Nacional de Ciencias Agrícolas (INCA), Instituto de Investigaciones de Sanidad Vegetal - INISAV, Instituto de Investigaciones Avícolas, Instituto de Investigaciones Porcinas, Instituto de Investigaciones Fundamentales en Agricultura Tropical
Institución
Resumen
Incluye un video-visitas a Cojimar (Cultivo hortalizas hidropónicas), Instituto de Pastos y forrajes, Agrícola Chacay, Instituto de suelos (Utilización de humus y compost), Centro de Abonos orgánicos y Centro de Reproducción de Entomopatógenos (15 minutos) Mediante esta gira los participantes pudieron obtener una visión general del sistema de agricultura orgánica cubano. Este sistema se caracteriza por utilizar tecnología local, incluyendo la producción de biofertilizantes y biopesticidas, por utilizar eficientemente los recursos productivos, por diversificar los cultivos e integrar a los animales, por preservar el ambiente y conservar los recursos naturales, y por involucrar a las comunidades rurales y a las cooperativas en la generación y transferencia de tecnologías. Este sistema de agricultura orgánica es coordinado por el Ministerio de Agricultura cubano, y está integrado por los siguientes actores: huertos populares, huertos intensivos, huertos de autoconsumo, campesinos particulares, empresas estatales y cooperativas de crédito y servicios. En este sistema el Estado entrega la tierra, sin costo, durante todo el tiempo que se destine a la producción de alimentos, y la comercialización de los productos se hace en forma directa, o por entrega a mercados mayoristas o a hogares de ancianos, entre otros. Finalmente, un aspecto interesante de destacar es que en este sistema el manejo nutricional de los cultivos se basa en la utilización de abonos verdes (leguminosas), compost, humus de lombriz y biofertilizantes, y que el control de malezas se realiza a través de limpieza manual, sin que existan otros métodos de control ni agentes biológicos que cumplan con esta función.