dc.date.accessioned2016-12-27T21:49:09Z
dc.date.accessioned2018-06-13T23:04:26Z
dc.date.available2016-12-27T21:49:09Z
dc.date.available2018-06-13T23:04:26Z
dc.date.created2016-12-27T21:49:09Z
dc.date.issued2006
dc.identifierhttp://hdl.handle.net/10533/165151
dc.identifier3030006
dc.identifier.urihttp://repositorioslatinoamericanos.uchile.cl/handle/2250/1543953
dc.description.abstractEl envejecimiento es un fenómeno social cuya naturaleza demográfica es puesta en evidencia tanto por sus causas como por sus repercusiones, ya que unas y otras se enraízan en factores sociales, económicos y culturales (Villa y Rivadeneira, 1999) posibles de dimensionar (cuantificar), de conocer su estructura (composición y distribución) y su evolución en el tiempo (dinámica) (San Martín y Pastor, 1990). Una primera aproximación conceptual al proceso de envejecimiento nos permite distinguir dos dimensiones: el envejecimiento que experimenta la población de un país y aquel que los individuos experimentan. El envejecimiento de la población de un país se define como el aumento de la proporción de personas de edad avanzada con respecto a la población total; sin embargo, como plantea Chesnais (1990) es preferible definirlo simplemente como la inversión de la pirámide de edades. El envejecimiento es un fenómeno social cuya naturaleza demográfica es puesta en evidencia tanto por sus causas como por sus repercusiones, ya que unas y otras se enraízan en factores sociales, económicos y culturales (Villa y Rivadeneira, 1999) posibles de dimensionar (cuantificar), de conocer su estructura (composición y distribución) y su evolución en el tiempo (dinámica) (San Martín y Pastor, 1990). Una primera aproximación conceptual al proceso de envejecimiento nos permite distinguir dos dimensiones: el envejecimiento que experimenta la población de un país y aquel que los individuos experimentan. El envejecimiento de la población de un país se define como el aumento de la proporción de personas de edad avanzada con respecto a la población total; sin embargo, como plantea Chesnais (1990) es preferible definirlo simplemente como la inversión de la pirámide de edades. El envejecimiento es un fenómeno social cuya naturaleza demográfica es puesta en evidencia tanto por sus causas como por sus repercusiones, ya que unas y otras se enraízan en factores sociales, económicos y culturales (Villa y Rivadeneira, 1999) posibles de dimensionar (cuantificar), de conocer su estructura (composición y distribución) y su evolución en el tiempo (dinámica) (San Martín y Pastor, 1990). Una primera aproximación conceptual al proceso de envejecimiento nos permite distinguir dos dimensiones: el envejecimiento que experimenta la población de un país y aquel que los individuos experimentan. El envejecimiento de la población de un país se define como el aumento de la proporción de personas de edad avanzada con respecto a la población total; sin embargo, como plantea Chesnais (1990) es preferible definirlo simplemente como la inversión de la pirámide de edades. El envejecimiento es un fenómeno social cuya naturaleza demográfica es puesta en evidencia tanto por sus causas como por sus repercusiones, ya que unas y otras se enraízan en factores sociales, económicos y culturales (Villa y Rivadeneira, 1999) posibles de dimensionar (cuantificar), de conocer su estructura (composición y distribución) y su evolución en el tiempo (dinámica) (San Martín y Pastor, 1990). Una primera aproximación conceptual al proceso de envejecimiento nos permite distinguir dos dimensiones: el envejecimiento que experimenta la población de un país y aquel que los individuos experimentan. El envejecimiento de la población de un país se define como el aumento de la proporción de personas de edad avanzada con respecto a la población total; sin embargo, como plantea Chesnais (1990) es preferible definirlo simplemente como la inversión de la pirámide de edades. El envejecimiento es un fenómeno social cuya naturaleza demográfica es puesta en evidencia tanto por sus causas como por sus repercusiones, ya que unas y otras se enraízan en factores sociales, económicos y culturales (Villa y Rivadeneira, 1999) posibles de dimensionar (cuantificar), de conocer su estructura (composición y distribución) y su evolución en el tiempo (dinámica) (San Martín y Pastor, 1990). Una primera aproximación conceptual al proceso de envejecimiento nos permite distinguir dos dimensiones: el envejecimiento que experimenta la población de un país y aquel que los individuos experimentan. El envejecimiento de la población de un país se define como el aumento de la proporción de personas de edad avanzada con respecto a la población total; sin embargo, como plantea Chesnais (1990) es preferible definirlo simplemente como la inversión de la pirámide de edades. El envejecimiento es un fenómeno social cuya naturaleza demográfica es puesta en evidencia tanto por sus causas como por sus repercusiones, ya que unas y otras se enraízan en factores sociales, económicos y culturales (Villa y Rivadeneira, 1999) posibles de dimensionar (cuantificar), de conocer su estructura (composición y distribución) y su evolución en el tiempo (dinámica) (San Martín y Pastor, 1990). Una primera aproximación conceptual al proceso de envejecimiento nos permite distinguir dos dimensiones: el envejecimiento que experimenta la población de un país y aquel que los individuos experimentan. El envejecimiento de la población de un país se define como el aumento de la proporción de personas de edad avanzada con respecto a la población total; sin embargo, como plantea Chesnais (1990) es preferible definirlo simplemente como la inversión de la pirámide de edades. El envejecimiento es un fenómeno social cuya naturaleza demográfica es puesta en evidencia tanto por sus causas como por sus repercusiones, ya que unas y otras se enraízan en factores sociales, económicos y culturales (Villa y Rivadeneira, 1999) posibles de dimensionar (cuantificar), de conocer su estructura (composición y distribución) y su evolución en el tiempo (dinámica) (San Martín y Pastor, 1990). Una primera aproximación conceptual al proceso de envejecimiento nos permite distinguir dos dimensiones: el envejecimiento que experimenta la población de un país y aquel que los individuos experimentan. El envejecimiento de la población de un país se define como el aumento de la proporción de personas de edad avanzada con respecto a la población total; sin embargo, como plantea Chesnais (1990) es preferible definirlo simplemente como la inversión de la pirámide de edades. El envejecimiento es un fenómeno social cuya naturaleza demográfica es puesta en evidencia tanto por sus causas como por sus repercusiones, ya que unas y otras se enraízan en factores sociales, económicos y culturales (Villa y Rivadeneira, 1999) posibles de dimensionar (cuantificar), de conocer su estructura (composición y distribución) y su evolución en el tiempo (dinámica) (San Martín y Pastor, 1990). Una primera aproximación conceptual al proceso de envejecimiento nos permite distinguir dos dimensiones: el envejecimiento que experimenta la población de un país y aquel que los individuos experimentan. El envejecimiento de la población de un país se define como el aumento de la proporción de personas de edad avanzada con respecto a la población total; sin embargo, como plantea Chesnais (1990) es preferible definirlo simplemente como la inversión de la pirámide de edades. El envejecimiento es un fenómeno social cuya naturaleza demográfica es puesta en evidencia tanto por sus causas como por sus repercusiones, ya que unas y otras se enraízan en factores sociales, económicos y culturales (Villa y Rivadeneira, 1999) posibles de dimensionar (cuantificar), de conocer su estructura (composición y distribución) y su evolución en el tiempo (dinámica) (San Martín y Pastor, 1990). Una primera aproximación conceptual al proceso de envejecimiento nos permite distinguir dos dimensiones: el envejecimiento que experimenta la población de un país y aquel que los individuos experimentan. El envejecimiento de la población de un país se define como el aumento de la proporción de personas de edad avanzada con respecto a la población total; sin embargo, como plantea Chesnais (1990) es preferible definirlo simplemente como la inversión de la pirámide de edades. El envejecimiento es un fenómeno social cuya naturaleza demográfica es puesta en evidencia tanto por sus causas como por sus repercusiones, ya que unas y otras se enraízan en factores sociales, económicos y culturales (Villa y Rivadeneira, 1999) posibles de dimensionar (cuantificar), de conocer su estructura (composición y distribución) y su evolución en el tiempo (dinámica) (San Martín y Pastor, 1990). Una primera aproximación conceptual al proceso de envejecimiento nos permite distinguir dos dimensiones: el envejecimiento que experimenta la población de un país y aquel que los individuos experimentan. El envejecimiento de la población de un país se define como el aumento de la proporción de personas de edad avanzada con respecto a la población total; sin embargo, como plantea Chesnais (1990) es preferible definirlo simplemente como la inversión de la pirámide de edades. 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El envejecimiento es un fenómeno social cuya naturaleza demográfica es puesta en evidencia tanto por sus causas como por sus repercusiones, ya que unas y otras se enraízan en factores sociales, económicos y culturales (Villa y Rivadeneira, 1999) posibles de dimensionar (cuantificar), de conocer su estructura (composición y distribución) y su evolución en el tiempo (dinámica) (San Martín y Pastor, 1990). Una primera aproximación conceptual al proceso de envejecimiento nos permite distinguir dos dimensiones: el envejecimiento que experimenta la población de un país y aquel que los individuos experimentan. El envejecimiento de la población de un país se define como el aumento de la proporción de personas de edad avanzada con respecto a la población total; sin embargo, como plantea Chesnais (1990) es preferible definirlo simplemente como la inversión de la pirámide de edades. El envejecimiento es un fenómeno social cuya naturaleza demográfica es puesta en evidencia tanto por sus causas como por sus repercusiones, ya que unas y otras se enraízan en factores sociales, económicos y culturales (Villa y Rivadeneira, 1999) posibles de dimensionar (cuantificar), de conocer su estructura (composición y distribución) y su evolución en el tiempo (dinámica) (San Martín y Pastor, 1990). Una primera aproximación conceptual al proceso de envejecimiento nos permite distinguir dos dimensiones: el envejecimiento que experimenta la población de un país y aquel que los individuos experimentan. El envejecimiento de la población de un país se define como el aumento de la proporción de personas de edad avanzada con respecto a la población total; sin embargo, como plantea Chesnais (1990) es preferible definirlo simplemente como la inversión de la pirámide de edades. El envejecimiento es un fenómeno social cuya naturaleza demográfica es puesta en evidencia tanto por sus causas como por sus repercusiones, ya que unas y otras se enraízan en factores sociales, económicos y culturales (Villa y Rivadeneira, 1999) posibles de dimensionar (cuantificar), de conocer su estructura (composición y distribución) y su evolución en el tiempo (dinámica) (San Martín y Pastor, 1990). Una primera aproximación conceptual al proceso de envejecimiento nos permite distinguir dos dimensiones: el envejecimiento que experimenta la población de un país y aquel que los individuos experimentan. El envejecimiento de la población de un país se define como el aumento de la proporción de personas de edad avanzada con respecto a la población total; sin embargo, como plantea Chesnais (1990) es preferible definirlo simplemente como la inversión de la pirámide de edades. El envejecimiento es un fenómeno social cuya naturaleza demográfica es puesta en evidencia tanto por sus causas como por sus repercusiones, ya que unas y otras se enraízan en factores sociales, económicos y culturales (Villa y Rivadeneira, 1999) posibles de dimensionar (cuantificar), de conocer su estructura (composición y distribución) y su evolución en el tiempo (dinámica) (San Martín y Pastor, 1990). Una primera aproximación conceptual al proceso de envejecimiento nos permite distinguir dos dimensiones: el envejecimiento que experimenta la población de un país y aquel que los individuos experimentan. El envejecimiento de la población de un país se define como el aumento de la proporción de personas de edad avanzada con respecto a la población total; sin embargo, como plantea Chesnais (1990) es preferible definirlo simplemente como la inversión de la pirámide de edades. El envejecimiento es un fenómeno social cuya naturaleza demográfica es puesta en evidencia tanto por sus causas como por sus repercusiones, ya que unas y otras se enraízan en factores sociales, económicos y culturales (Villa y Rivadeneira, 1999) posibles de dimensionar (cuantificar), de conocer su estructura (composición y distribución) y su evolución en el tiempo (dinámica) (San Martín y Pastor, 1990). Una primera aproximación conceptual al proceso de envejecimiento nos permite distinguir dos dimensiones: el envejecimiento que experimenta la población de un país y aquel que los individuos experimentan. El envejecimiento de la población de un país se define como el aumento de la proporción de personas de edad avanzada con respecto a la población total; sin embargo, como plantea Chesnais (1990) es preferible definirlo simplemente como la inversión de la pirámide de edades.
dc.languagespa
dc.publisherCOMISION ECONOMICA PARA AMERICA LATINA Y EL CARIBE (CEPAL)
dc.relationhttp://repositorio.cepal.org/bitstream/handle/11362/4043/S2006017.pdf?sequence=1
dc.relationinfo:eu-repo/grantAgreement/Fondecyt/3030006
dc.relationinfo:eu-repo/semantics/dataset/hdl.handle.net/10533/93479
dc.relationinstname: Conicyt
dc.relationreponame: Repositorio Digital RI2.0
dc.relationinstname: Conicyt
dc.relationreponame: Repositorio Digital RI 2.0
dc.rightsinfo:eu-repo/semantics/openAccess
dc.titleEL ENVEJECIMIENTO DE LA POBLACION INDIGENA EN AMERICA LATINA: APROXIMACION CONCEPTUAL Y SOCIODEMOGRAFICA
dc.typeCapitulo de libro


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