| dc.description.abstract | La enseñanza de la administración se articula alrededor de las llamadas funciones que dividen la empresa. Hasta ahora existían dos tipos de gerentes en las empresas: los especialistas dedicados a las tareas técnicas con funciones bien delimitadas y los generalistas que aspiraban a la gerencia general. Las áreas especializadas, producción, finanzas, marketing, recursos humanos y otros, hablan cada uno un lenguaje propio, mostrando así una total desvinculación de las áreas funcionales, ninguna comprende el papel de las demás y menos el de la empresa como un todo. A la hora de la verdad las "funciones" de la empresa no existe sino en la cabeza de los profesores: es una categorización conveniente de la acción empresarial para desmenuzarlo en pedazos fáciles de enseñar. La realidad de los problemas administrativos es global. Por ejemplo: "si yo soy gente de Marketing, no me involucro en finanzas, primero porque no me lo permiten y segundo porque no se nada de finanzas". La gerencia moderna nos obliga a buscar más allá del gerente tradicional: especialista y generalista, un nuevo tipo de gerente capacitado para manejar las empresas del siglo XXI, experto en su área funcional y adepto del manejo global de la empresa: el gerente integral. Durante las últimas décadas los gerentes han manejado una serie de ideas o términos más conocidos como paradigma dominante, comenzamos en los años 50, con la organización, en los 60 y 70, la estrategia, luego en los 80, la cultura organizacional, y la calidad total, que tuvo furor en los años 90. El empoderamiento, más allá de los modos administrativos es necesario buscar uno entre otros un verdadero tema que no puede ser cambiado del comportamiento de la empresa: la competitividad, que es el fin de la acción empresarial., a la larga, sólo sobreviven las empresas competitivas. | |
