| dc.description | A fines de 1994 el Sistema Interconectado Centro Norte - SlCN, el principal sistema eléctrico del país contaba con un escaso margen de reserva para abastecer la demanda de los usuarios, ya que el Fenómeno del Niño había retrasado la temporada de lluvias en la sierra central y amenazaba ef normal abastecimiento de agua para las centrales hidroeléctricas. Por otro lado, las proyecciones meteorológicas hacían prever similares condiciones para 1995; lo que sumado a la creciente actividad económica interna y el cada vez mayor número de hogares electrificados, configuraban un escenario de potencial déficit energético para el período 1995-1996.
Ante esta coyuntura, el Ministerio de Energía y Minas inició el desarrollo de acciones con el objetivo de controlar el crecimiento de la máxima demanda del SICN, orientando a los usuarios a ahorrar energía eléctrica, especialmente durante las horas punta y a utilizar equipos eficientemente energéticos.
A través del Proyecto para Ahorro de Energía se implementó la Campaña Nacional de Ahorro de Energía, una campaña de información y sensibilización dirigida a los tres sectores de consumo de electricidad más importantes: el sector residencial, el sector industrial y de servicios y el sector comercial, lográndose controlar el crecimiento de la máxima demanda y evitándose la necesidad de efectuar racionamientos que hubieran afectado el normal desenvolvimiento de la economía y generado malestar en la sociedad.
Años más tarde, la apertura del mercado eléctrico a la inversión privada y los compromisos de inversión asociados con los procesos de privatización de gran parte de la infraestructura eléctrica del Estado posibilitaron a la oferta eléctrica superar con holgura la demanda.
El presente estudio se propone evaluar y cuantificar el impacto de las acciones de promoción del ahorro de energía del período 1 995 - 2000 sobre el consumo de energía eléctrica y la máxima demanda del sistema. En un primer análisis econométrico se determina si existe una diferencia sustancial entre la demanda efectivamente observada y la que hipotéticamente se hubiese apreciado de no haberse llevado adelante la Campaña. En otras palabras, se compara el comportamiento de la demanda de energía "con campaña vs. sin campaña".
De este primer análisis econométrico, se encontró que durante el período de la Campaña hubo una reducción significativa en el consumo de energía de los usuarios residenciales, así como en la demanda de potencia del sistema en su conjunto.
Este resultado se analiza más en detalle en un segundo cálculo, donde se propone que los dos factores que determinaron estas reducciones en el sector residencial fueron: ( 1) el mayor uso de equipos eficientemente energéticos, específicamente las "lámparas fluorescentes compactas" o focos ahorradores y ( 2) la mejor actitud de la población hacia el ahorro de energía, vale decir, la introducción de buenos "hábitos de consumo de energía".
La importancia de este Informe radica en la necesidad de consolidar el cálculo de los beneficios que el desarrollo de la Campaña Nacional de Ahorro de Energía habría significado para el país, desde una óptica académica e independiente, con supuestos claros y una metodología fácilmente verificable. | |
