dc.description.abstract | Mediante la elaboración de análisis en un marco etnobiológico, se llevó a cabo una
observación e identificación de los productos ofrecidos e intercambiados en la feria
realizada en Noviembre de 2015, en Santa Catalina, Jujuy. Estos productos reflejan
algunos de los servicios ecosistémicos de gran importancia para las comunidades del
altiplano y valles que participan de la misma.
El trabajo de pasantía desarrollado se enmarcó en base a la conjunción de dos
aproximaciones, la etnobiológica y la de servicios ecosistémicos.
La etnobiología estudia el modo en el que los seres humanos perciben, proyectan,
representan, valoran, idealizan, utilizan y en general se relacionan con la biodiversidad y
recursos naturales. O sea cómo la gente conoce y piensa a los seres vivos (cognitivo,
mitológicos) y cómo los usan (recursos materiales, económicos, simbólicos) (Vilá, 2014).
Habitualmente la etnobiología se refiere al “conocimiento tradicional” de grupos de
personas que están en relación directa de uso, con los recursos naturales locales, como
pastores, campesinos, artesanos, practicantes de la medicina tradicional. Una visión
amplia de la etnobiología incluye expresiones socioculturales asociadas a: taxonomías
locales y regionales, la importancia de los animales y plantas en cosmogonías y
cosmovisiones, los aspectos de uso (alimenticio, medicinal, económico, lúdico, de
compañía y otros), a la forma de obtención y preparación de sustancias extraídas de las
plantas, animales y hongos, al origen doméstico y las prácticas de conservación y manejo
(Albuquerque, 1998), Vilá, 2014).
Por lo antes presentado, se desprende que la etnobiología pertenece a un campo de
estudio multidisciplinario basándose en enfoques y métodos de las ciencias sociales y
biológicas que conjuga los conocimientos y percepciones, saberes y prácticas de los
pueblos locales con respecto a los conocimientos, clasificación y uso de los recursos
naturales, en un contexto cultural, espacial y temporal (Ladio, 2016). | |