| dc.description | Los Andes de Mérida, uno de los cinturones orogénicos más importantes en Venezuela, es objeto de estudio para el proyecto GIAME (Geociencia Integral de Los Andes de Mérida), el cual es desarrollado por un grupo de investigación multidisciplinario que pretende iluminar la estructura litosférica de esta compleja cordillera para un mejor entendimiento de la situación geodinámica presente. Como una de las actividades del grupo de investigación, se propusieron tres perfiles sísmicos que atraviesen los segmentos tectónicamente más representativos de los Andes de Mérida. El presente trabajo surge como un aporte a la trayectoria de investigación a escala cortical en Venezuela, complementando la información en el occidente del país utilizando métodos sismológicos con fuente activa dentro del marco del proyecto GIAME. Para ello se realizó un modelado bidimensional de los Andes de Mérida, en el perfil denominado Andes Central, aplicando el método de sísmica de refracción profunda, dicho perfil tiene una longitud de 380 km y se extiende desde la costa del vii estado Falcón, cerca de la población de Mene de Mauroa, en su límite noroeste y atraviesa de forma perpendicular la cordillera de los Andes merideños hasta su extremo sureste en el límite de los estados Barinas y Apure, cercano a la población de Guasdualito A partir de la metodología aplicada, se obtuvieron secciones sísmicas para cada disparo realizado en el perfil Andes Central, esto a partir de un riguroso procesamiento que permitió caracterizar lo más claramente posible las fases corticales de interés, como lo son: fase Pg (refracción en la corteza superior), fase Pi (reflexión intracortical), fase PmP (reflexión en la discontinuidad de Mohorovicic) y finalmente la fase Pn (refracción en el manto superior), adicionalmente en algunos disparos de aprecia una llegada reflectiva profunda, con la que se infiere un cambio importante de velocidades en el manto superior. Como principal resultado para el perfil Andes Central se obtuvo un modelo bidimensional de velocidades a escala cortical, con una cobertura satisfactoria en la mayoría de las interfaces de la corteza, a partir del análisis e identificación de las principales fases corticales observadas en las secciones sísmicas elaboradas para tal fin. Dicho modelo consistió de 5 capas, la primera de ellas representativo de los sedimentos cenozoicos, con un rango de velocidad promedio de 2 a 4 km/s, una segunda capa definida como sedimentos cretácicos, con velocidades entre 4 y 5 km/s, infrayace la tercera capa, estipulada como el basamento cristalino por debajo de las cuencas y que aflora en la cordillera andina, con velocidades promedio entre 5,5 y 6,3. La cuarta capa es la corteza inferior por encima de la discontinuidad de Moho, presentando un rango de velocidades promedio de 6,5 a 7 km/ y finalmente una quinta capa correspondiente al manto superior litosférico, con velocidades superiores a los 7,7 km/s. Se observa una raíz cortical con una profundidad máxima de 53 km, la cual se encuentra desfasada con la mayor altitud de la cadena andina, aproximadamente 10 km hacia el Noroeste. | |
