| dc.description.abstract | El acompañamiento de un proceso terapéutico, a individuos, parejas, y familias por parte
de un interventor; en ocasiones tiene momentos de mucha gratificación; al mirar, escuchar
y sentir a seres humanos con una nueva visión de las dificultades que están atravesando y
cómo afrontarlas de forma más saludable, encontrando nuevos caminos y opciones, para
esta etapa de su vida, esto trae mucha motivación y esperanza a la vida del interventor.
Pero el acompañamiento terapéutico no siempre es así, en ocasiones también hay dolor,
frustración, ira, violencia, muerte, desempleo; en fin unan serie de vicisitudes, que forman
parte de la vida de los seres humanos en su diario vivir. La gran mayoría de profesionales
relacionados con profesiones de ayuda como médicos, terapeutas, pastores, sacerdotes,
interventores, socorristas reconocen que estar cerca del dolor humano, afecta sus vidas.
Esta afectación sobre todo en los interventores sistémicos, en gran medida está relacionada
con el modelo de intervención que ellos tienen, así como la actitud con la cual se acercan a
los consultantes. | |
