| dc.description | <p>El origen de este trabajo investigativo tiene dos vertientes: en primer lugar, la realidad histórica, social, política y cultural de un país que sueña con una paz estable y duradera después de haber estado enmarcado dentro de la violencia en sus múltiples manifestaciones. Un segundo escenario, es la realidad de la Educación Artística en las Instituciones Educativas Públicas, donde se evidencia la necesidad de una formación artística que permita superar el imaginario de “área improductiva e innecesaria” dentro de las lógicas instrumentales de la educación, y que a la vez pueda ser aprovechada en sus múltiples bondades como área fundamental en la transformación de realidades del contexto y en la construcción de culturas de paz.</p>
<p>De cara a este panorama se propone la educación artística como un poderoso dispositivo para potenciar las capacidades humanas en los niños, niñas, adolescentes y jóvenes, que permita vincular la formación en valores y emociones morales, así como el desarrollo de las capacidades humanas vinculadas a desarrollo humano integral que prepare a los ciudadanos en formación para actuar dentro de la convivencia pacífica aún en situaciones de violencia y conflicto. Los elementos que ofrece la formación desde las artes se convierten en posibilidades reales de empoderamiento pacifista, de estructuración de liderazgo resilientes dentro de las poblaciones, y de oportunidad para reparar y cohesionar socialmente a las comunidades. Este documento parte de las percepciones que como docente de artes dieron origen al proyecto investigativo, la justificación se proyecta desde el hacer docente de sujeto artista, aprendiz y constantemente enseñante. Incluye el rastreo bibliográfico en bases de datos colombianas y extranjeras. De igual manera se hace un recorrido por los conceptos de violencia, paz, culturas de paz, educación artística y educación para la paz dentro de un marco de referencia conceptual. Los mayores aportes provienen de las voces de docentes y estudiantes influidos de la experiencia estética en las aulas de colores que constituyen nuestras escuelas urbanas, migrantes y desconocidas para, bajo la lupa de la hermenéutica acercarnos a los fundamentos y aprendizajes de la educación artística en perspectiva de territorio, y de esta manera construir criterios que nos permitan aportar a la docencia de las artes, a la construcción de paz desde la escuela y con las comunidades, y de igual manera y no menos importante, hacer sugerencias a las políticas públicas en educación, y educación artística para la paz.</p> | |
