Artículos de revistas
The alleged “anchor point” of 732 BC for the destruction of Hazor V
El pretendido “punto de anclaje” de 732 a.C. para la destrucción de Hazor V
Fecha
2008Registro en:
1667-9202
Autor
James, Peter
Institución
Resumen
Abstract: All previous discussions of the chronology of Iron Age Hazor assume as an “anchor
point” the destruction of Hazor V by Tiglath-pileser III in 732 BC. Re-examination of
Yadin’s case for this date shows that it was merely an assumption on his part. A review of
the dating evidence – partly historical but principally the input from the independently
dateable archaeological chronologies of Cyprus, Phoenicia, Mesopotamia and Egypt
– suggests that Hazor V fell much later than 732 BC. Consequently both the Yadin
(“high”) and Finkelstein (“low”) models for the chronology of Iron II Hazor are
working from an incorrect baseline. A model is offered here which, while arguing
a shift of the Iron IIA period from the tenth to ninth century BC, does not unduly
compress Strata X-VII, closes the alleged long settlement gap at the site during the
Neo-Babylonian to Early Persian period and resolves numerous dating anomalies
arising from imported finds. Resumen: Todas las discusiones previas sobre la cronología de Hazor en la Edad de Hierro
consideran como un “punto de anclaje” la destrucción de Hazor V por Tiglatpileser
III en 732 a.C. Una reexaminación del caso de Yadin para esta datación muestra que
era sólo una mera conjetura de su parte. Una revisión de la evidencia para la datación
– en parte histórica pero principalmente la clave para las cronologías arqueológicas
independientemente datables de Chipre, Fenicia, Mesopotamia y Egipto – sugiere que
Hazor V cae mucho más tarde que 732 a.C. Consecuentemente, tanto el modelo de
Yadin (“alto”) como el de Finkelstein (“bajo”) para la cronología del Hierro II de Hazor
trabajan desde un punto de partida incorrecto. Aquí se ofrece un modelo que, mientras
sostiene un cambio del periodo del Hierro IIA del siglo IX al X a.C., no comprime excesivamente los estratos X-VII, cierra el supuesto largo hiato de asentamiento en el
sitio que abarca del periodo Neo-Babilónico al Persa Temprano y resuelve numerosas
anomalías en la datación, producto de los hallazgos importados.