Artículo de revista
Pólipo hamartomatoso en pelvis renal: reporte de un caso y revisión de la literatura
Hamartomatous polyp in the renal pelvis: case report and literature review
Fecha
2011-12Autor
Aponte Varón, Hernán Alonso
Wadskier Gutiérrez, Luis Alfredo
Montes Gómez, Johanna María
Resumen
Objetivo: reportar el caso de una paciente femenina de 46 años con sospecha de tumor urotelial de tracto urinario superior quien es llevada a nefroureterectomía con cuña vesical. La patología reporta pólipo hamartomatoso en uréter proximal y pelvis renal. Materiales y métodos: paciente de 46 años con cuadro de larga evolución de dolor lumbar derecho y fiebre. Se realiza tomografía axial computarizada (TAC) de abdomen que evidencia masa endoluminal en el tercio proximal del uréter derecho con extensión hacia la pelvis renal que produce hidronefrosis marcada con disminución asociada del parénquima renal. Urografía excretora con retraso en la eliminación del medio de contraste del riñón derecho con hidroureteronefrosis grado III derecha. Se intenta realizar ureteroscopia semirrígida diagnóstica sin lograr avanzar el ureteroscopio más allá del tercio medio del uréter, y sin lograr tomar biopsia de la lesión por lo que se decide
realizar nefroureterectomía con cuña vesical, la cual es llevada a cabo sin complicaciones. La patología
reporta pólipo hamartomatoso de uréter proximal y pelvis renal. Se realizó una revisión de la literatura en
Medline incluyendo los términos hamartoma, neoplasias fibroepiteliales, neoplasias ureterales, neoplasias
urológicas, pólipos. Conclusiones: las lesiones hamartomatosas son la segunda neoplasia más común del
tracto urinario superior, siendo más frecuentes en el uréter en el tercio superior y en la unión pieloureteral;
en la pelvis renal se presentan en el 15% de los casos. Su incidencia tiene un pico de edad a los 30-40 años.
Las lesiones en la pelvis renal son más frecuentes en las mujeres aportando el 65% de los casos reportados.
No tienen etiología clara. Clínicamente se presentan con dolor en flanco y hematuria. Su diagnóstico suele realizarse luego de nefroureterectomía por alta sospecha de lesión maligna. Hay características radiológicas y anatómicas que ayudan a diferenciarlas de tumores uroteliales. Actualmente, el diagnóstico puede realizarse con biopsia por ureteroscopia flexible. Antiguamente, su manejo se realizaba por cirugía abierta; sin embargo, en la actualidad, el manejo endoscópico de tumores pequeños es el ideal. Purpose: To report the case of a 46 years/old female patient with suspected urinary tract urothelial
tumor in whom a nephroureterectomy with resection of a bladder cuff is performed. The pathology reports
hamartomatous polyp in the proximal ureter. Methods: A 46 years/old female patient has a long
history of back pain and fever. A computerized tomography (CT) scan reports endoluminal lesion in the
proximal third of the ureter with extension to the renal pelvis, with hydronephrosis and renal parenchyma
atrophy. Intravenous urography shows slow contrast elimination by the right kidney and hydronephrosis.
A semirigid ureteroscopy was performed, but it was impossible to continue further than the mid urether. A
nephroureterectomy with bladder cuff was performed without any complication. The pathology analysis
reports an hamartomatous polyp of the proximal ureter an renal pelvis. A literature review was performed
in Medline with the MESH terms hamartoma, fibroepithelial neoplasms, ureteral neoplasms, urologic neoplasms,
polyps. Conclusions: Hamartomatous lesions are the second most common malignancy of the
upper urinary tract and are more common in the upper third of the ureter and ureteropelvic junction. They
occur in the renal pelvis in 15% of the cases. Their peak incidence is during the third or fourth decade.
Lesions at the renal pelvis are more commonly seen in females,accounting for 65% of the cases. They have
no clear etiology. Clinically, their presentation is with flank pain and hematuria. Their diagnosis is usually
made after nephroureterectomy performed due to a suspected malignancy. There are radiological and anatomical
features that can allow us to differentiate them from urothelial tumors. The current diagnosis can be
performed with biopsy by flexible ureteroscopy. Previously, they were treated with open surgery. Actually
the recommended treatment for small tumors is an endoscopic approach.