Chuensuca, comunidad ecoterapéutica enfocada en la prevención del estrés posmoderno

Abstract

Los grandes centros urbanos caracterizan esta cultura del rendimiento, son los espacios donde se concentran en mayor nivel patologías relacionadas al estrés y el deterioro de la salud mental y donde encontramos un déficit en programas de salud preventiva, infraestructura o espacios de calidad que logren contrarrestar el aumento de estas patologías y que ofrezcan un trato digno a las personas afectadas. Gran parte de la población mundial está siendo afectada por el estrés posmoderno, considerado como la epidemia del siglo XXI, instaurado en el modelo neoliberal el cual establece a la competitividad y al rendimiento como pilares de la sociedad y la cultura actual, produciendo un ambiente nocivo donde cada individuo lucha entre sí por la acumulación de capital económico. En este ambiente predomina la individualidad de personas expuestas a un gran flujo de estímulos e información de la era digital, donde se establecen largas jornadas laborales que les posibiliten alcanzar un beneficio económico dentro de una competencia constante entre los unos y los otros, a cambio del deterioro de su salud física, mental y emocional al vivir entorno a la productividad y el rendimiento excesivo convirtiéndolos en autómatas digitales que sostienen las bases de este modelo económico. Al ser un ambiente excesivamente competitivo, dirige a la sociedad a un estado de cansancio y agotamiento, el cual se ve reflejado en un aumento de los trastornos mentales relacionados al estrés crónico, la ansiedad y la depresión cómo patologías presentes en la posmodernidad. El objetivo de este trabajo, es brindar una alternativa a través de un programa arquitectónico enfocado en la prevención y reducción de síntomas relacionados al estrés en la posmodernidad, partiendo de identificar cómo el modelo neoliberal está contribuyendo al aumento de este tipo de enfermedades a nivel mundial, luego centralizar la problemática en Colombia, específicamente en Bogotá, ciudad donde se evidencia un aumento relacionado a los trastornos mentales, identificando un campo de acción en donde la arquitectura pueda realizar un aporte desde el campo de los espacios terapéuticos. De manera crítica se analizarán algunos ejemplos de espacios convencionales para el tratamiento de trastornos mentales ubicados en centros urbanos, que representan actualmente un riesgo más allá de ser una solución, al evidenciar en ellos bajas condiciones de habitabilidad y confort espacial. Se trata de evidenciar un déficit en programas preventivos, infraestructura y espacios dignos para la salud mental preventiva en Bogotá, enfocados en el tratamiento del estrés posmoderno (estrés del siglo XXI), para así desarrollar una propuesta espacial basada en investigaciones recientes que demuestran cómo la naturaleza integrada al diseño de espacios terapéuticos para el cuidado de la salud mental trae múltiples beneficios para las personas afectadas. Finalmente justificar cómo el programa arquitectónico planteado <<Chuensuca >>, busca diseñar una comunidad ecoterapéutica ubicada en Pacho, Cundinamarca, bajo un entorno natural capaz de alentar, reparar y restablecer a las personas afectadas a través de la noción de ecoterapia, noción que reconoce los beneficios terapéuticos de reconectar a las personas por medio actividades y espacios que estimulen una relación cercana con la naturaleza como entorno saludable. De manera complementaria abordar el diseño biofílico, la ecología Muisca y la bioconstrucción como conceptos que estructuran el “alma” de este programa arquitectónico, abordando el uso de materiales locales como la Guadua, presentes en el lugar de intervención, como en elegir procesos constructivos que impliquen un bajo impacto ambiental sobre el entorno natural donde se implantará este proyecto arquitectónico apoyado en un modelo de gestión basado en el cooperativismo y la economía solidaria.