Artículo de revista
Mis muertos
Fecha
2004-01Registro en:
0121-0777
Autor
Acosta, Juvenal
Institución
Resumen
El viento miserable de la noche, el rencor vivo, los murmullos que despiertan a los muertos. Juan Rulfo y Comala, la tierra caliente de la culpa y el remordimiento. No hay una sola lectura de Pedro Páramo y El llano en llamas, esas dos grandes obras de la literatura. Su obra va más allá de la denuncia y va más allá del lenguaje: no es nada más literatura, es sangre y es tierra. Rulfo confirmó que la escritura no es una parcela de los privilegiados y que hay que escribir sobre aquello de lo que se tieneevidencia y certeza. Hay que leer a Rulfo, aprender de él la economía del lenguaje, el rigor sintáctico, la ironía fina, el espacio blanco del discurso, y hay que enseñarles a nuestros jóvenes a entenderlo.