Trabajo de grado - Pregrado
Efectos socioeconómicos de la moneda única con respecto a las variables económicas
Fecha
1999-12Autor
Silva Quintero, Edgar
Institución
Resumen
Desde finales de la Segunda Guerra Mundial se fueron formando
diversos bloques económicos en todo el mundo y uno de los más
consolidados es el de la Unión Europea (UE).
Con una superficie de más de tres millones de Km2, aproximadamente
un tercio de la de Estados Unidos y nueve veces superior al a de Japón,
está formada en la actualidad por quince países, once de los cuales
cambiarán sus monedas nacionales por el euro, estos once países son:
Alemania, Austria, Bélgica, España, Finlandia, Francia, Holanda, Irlanda,
Italia, Luxemburgo y Portugal.
Junto con Estados Unidos y Japón, la UE constituye uno de los tres
bloques económicos más importantes del mundo desarrollado, por tal
motivo y según las predicciones el euro será la moneda del siglo XXI
que mediante un proceso de transición sustituirá a todas las monedas
nacionales de los países participantes de la UME.
En 1999, cuatro décadas después de que entraron en vigor los Tratados
de Roma, la Unión Europea es una realidad que se asienta en tres
pilares: las comunidades europeas, la política exterior y de seguridad y
la cooperación en materia de justicia e interior, dentro de las cuales se
desarrollarán políticas comunitarias en campos muy variados. La
existencia de una moneda única complementa el mercado único además
de favorecer su desarrollo, a la vez que ayuda a la consecución de una
mayor unidad política entre los países miembros.
Los once países están sujetos para ingresar en el euro a una serie
condiciones, que son de naturaleza macroeconómica y con criterios de
convergencia, entre los que se cuentan: Estabilidad de precios
(inflación), tipos de interés a largo plazo similares, finanzas públicas
saneadas (déficit público y deuda pública) y estabilidad de tipo
cambiario.
El euro se convertirá en una de las monedas más importantes del
mundo, pasando a ser una moneda de reserva, refugio y referencia en
multitud de transacciones. La utilización del euro como denominación
de pagos en el comercio internacional se traducirá en un menor riesgo e
incertidumbre a la hora de realizar intercambios comerciales con países
fuera del área euro. Las ventajas que tiene para exportadores e
importadores, al poder facturar sus intercambios en su propia moneda,
son notables por la seguridad de los pagos e ingresos futuros y el ahorro
de costes inherentes a la cobertura de dichas operaciones.
Lógicamente el euro no va a estar solo en el mundo sino que tendrá
relaciones de toda clase con otras monedas, entre ellas el dólar, el
franco suizo, el yen, etc., además de la relación con los países de la
propia UE que todavía no estarán dentro de la UEM.
Para Colombia la moneda más importante es el dólar. En ese orden de
ideas no se espera que el euro tenga un impacto tan grande en la
economía colombiana como muy seguramente lo tendrá en los países
del Mercado Común del Sur (Mercosur) y particularmente en Argentina,
donde la tercera parte del comercio se desarrolla con Europa.
El euro según las predicciones sacará a flote un grave problema que no
sólo tiene Europa sino todo el mundo, el cual es la economía
subterránea, ya sea por narcotráfico, crimen organizado o por eludir
impuestos. Este tema se desarrollará detalladamente en el capítulo No.
5.
Por último, y no siendo menos importante, están algunos sectores
económicos que se verán afectados por la nueva moneda: sociedad,
sector financiero, sector informático, además de las políticas fiscales y
monetarias