dc.description.abstract | El sistema de la filosofía trascendental es, sin duda alguna, uno de los aportes más brillantes
de finales del siglo XVIII, y aún relevante en el XXI. Entre todos los elementos, constitutivos y
reguladores, el que se toma para la exposición que sigue es el concepto de tiempo. Se justifica
dicha exposición por la preeminencia que ocupa este concepto en parte del proyecto pre―crítico
y en gran parte del proyecto crítico de la filosofía kantiana. En la Crítica de la Razón Pura, obra
que inaugura el segundo proyecto, Kant sostiene que el tiempo es una intuición a priori y una de
las formas puras de la ciencia de la sensibilidad a priori. Su postura lo alejará inmediatamente de
filósofos anteriores. No solo porque el tiempo, en cuanto elemento constitutivo del sujeto, es
condición de posibilidad de la experiencia y conocimiento. Sino que, además, porque es una de
las determinaciones mediante la cual el sujeto cognoscente puede representarse a sí mismo como
objeto de conocimiento, y, por ende, constituir este sistema. | |