Tesis Doctorado
Sistema nervióso ovárico intrínsico y su activación durante la condición de ovarió poliquístico.
Autor
Greiner-Gebauer, Monika Marcela
Institución
Resumen
La activación del sistema nervioso simpático ha sido reconocida como uno
de los factores que forman parte de la etiología del síndrome de ovario
poliquístico (SOP) en humanos y en modelo de rata. La literatura muestra datos
consistentes que relacionan el aumento de la actividad simpática, expresada en
un aumento en la liberación de norepinefrina (NE) en ratas y en las
prolongaciones nerviosas en humanos, y la formación de quistes ováricos. Así
mismo, la simpatectomía en animales y la resección de la zona de entrada de
los nervios ováricos en humano, permiten una vuelta a la ciclicidad estral y
menstrual respectivamente. Datos clínicos apuntan, además, a que la condición
poliquística sería persistente, ya que las mujeres con SOP durante el embarazo
y el postparto presentan patrones hormonales alterados con respecto a las
mujeres control, a pesar d existir un bloqueo central del eje hipotálamo-hipófisisgónada.
Esto indica que existe también un componente intraovárico que
participa en la mantención de esta condición.
En modelo animal, durante el establecimiento de la condición quística, se ha
observado un aumento conjunto en el mRNA para el factor de crecimiento
neuronal (NGF) y en el de su receptor de baja afinidad p75NTR. Se sabe que la
sobreexpresión de esta neurotrofina gatilla la activación nerviosa y además
genera quistes ováricos y que la utilización de anticuerpos anti-NGF, permite
una vuelta a la normalidad.
En el ovario se han descrito diferentes tipos celulares que podrían participar
junto con la inervación extrínseca en la homeostasis de las catecolaminas
ováricas. Estos serian la contraparte ovárica intrínseca que participaría, en
respuesta a cambios en el complejo neurotrófico NGF/p75NTR, junto con la
inervación extrínseca, en la hiperctividad nerviosa persistente, característica de
la condición poliquística. Para resolver esta hipótesis usamos un modelo de ovario poliquístico
generado en ratas, 60 días post administración de una dosis única de valerato
de estradiol. Se desarrolla así una condición quística en los ovarios de los
animales con características similares a las humanas. En este modelo
observamos aumento en el mRNA para p75NTR y con esto una mayor
disponibilidad de NGF para su acción sobre las células blanco. Esto podría
explicar una activación tanto del componente nervioso extrínseco como
intrínseco. Mediante RT-PCR en tiempo real medimos la concentración de
mRNA para Tirosina hidroxilasa, marcador de la presencia de cuerpos
neuronales, corroborando la presencia éstas. Sin embargo al no haber cambios
en la concentración del mRNA entre la condición control y la condición quística,
creemos que las neuronas no participan de manera activa durante la condición
quística. Usando inmunohistoquimica observamos la presencia del
transportador de Dopamina (DAT) en células de granulosa, células intersticiales
y cuerpos lúteos tanto en la condición quística como en la control y creemos
que este transportador es un buen marcador de algunas de las células del
componente nervioso ovárico intrínseco. Para evaluar la funcionalidad del
sistema nervioso extrínseco e intrínseco, se midió la capacidad de liberación del
trazador radiactivo norepinefrina tritiada ( 3HNE). Observamos una mayor
capacidad de liberación de 3HNE en los animales con quistes y al desnervar,
esta liberación disminuye sólo a niveles control, indicando, desde un punto de
vista fisiológico, la participación de un componente celular intraovárico. La
incorporación de 3HNE es un indicador de la presencia de estructuras
nerviosas. En la condición quística la incorporación es mayor que en la
situación control y cuando se desnerva al animal con quistes, la incorporación
no varía, indicando que el componente intraovárico está activado en la
condición quística. Al bloquear la incorporación de 3HNE con cocaína, los
animales con quistes y desnervación, incorporan menos que los animales con quistes, indicando que la incorporación de NE en los animales con quistes,
estaría mediada probablemente por DAT.
Los resultados presentados muestran evidencias fuertes sobre la existencia
de un sistema nervioso ovárico intrínseco, el que participaría junto con el
sistema nervioso extrínseco en el control de los niveles de catecolaminas
intraováricas. Además la activación de este componente intraovárico, dada por
cambios en el complejo neurotrófico, podría explicar la mantención de la
hiperactividad nerviosa característica de esta condición. PFCHA-Becas Doctor en Bioquímica 100p. PFCHA-Becas TERMINADA