dc.contributor*Villacis Mora, Aida Patricia
dc.creatorAcosta Vásquez, Carla Daniela
dc.creatorFlores Córdova, Estefanía Michelle
dc.date.accessioned2016-06-04T10:56:54Z
dc.date.available2016-06-04T10:56:54Z
dc.date.created2016-06-04T10:56:54Z
dc.date.issued2015
dc.identifierhttp://repositorio.puce.edu.ec/handle/22000/10429
dc.description.abstractAntecedentes: La enfermedad por reflujo gastro-esofágico (ERGE) se da como consecuencia del reflujo del contenido gástrico al esófago ocasionando síntomas molestos al paciente, en la actualidad constituye una de las patologías del aparato digestivo con mayor prevalencia, siendo uno de los motivos de consulta más frecuentes tanto en el campo de la gastroenterología como en el de la medicina familiar, por lo que el conocimiento de los factores predisponentes de esta patología, así como el análisis de los estudios complementarios usados, en este caso manometría y endoscopia digestiva alta es esencial para establecer directrices diagnósticas, para de esta manera contribuir a la mejora en la conducta terapéutica de estos pacientes, y así optimizar su calidad de vida y disminuir el impacto socio-económico de esta patología. Objetivo: Determinar la presencia de lesiones endoscópicas en los pacientes con diagnóstico establecido de ERGE mayores de 18 años del centro gástrico del Hospital Carlos Andrade Marín (HCAM) y su asociación con alteraciones de la manometría esofágica a fin de evaluar su contribución con el manejo integral de la patología y mejoramiento de la calidad de vida. Pacientes y métodos: Se realizó un estudio analítico de cohorte histórica, de los pacientes con diagnóstico de ERGE y que poseían endoscopia digestiva alta y manometría esofágica del centro gástrico del HCAM. De la revisión exhaustiva de historias clínicas en el sistema AS400 de pacientes escogidos aleatoriamente requerida para la investigación, 180 cumplieron con los criterios de inclusión con los que se realizaron tablas separando las variables numéricas y cualitativas de interés, las mismas que se analizaron de forma univarial y bivarial utilizando los diferentes índices estadísticos. Sus datos fueron analizados mediante el programa SPSS. Resultados: Se estudiaron un total de 180 pacientes con diagnóstico establecido de enfermedad por reflujo gastroesofágico, escogidos de forma aleatoria, los mismos que fueron sometidos a endoscopia digestiva alta (EDA) y manometría. El 36,7% fueron de sexo masculino y el 63,3% de sexo femenino. El promedio de edad de los participantes fue de 50,98 años. El índice de masa corporal promedio calculado dentro de la muestra fue de 27.06, indicador de sobrepeso. El 64,4% presentaron como sintomatología pirosis y regurgitación, el 41,1% presentaron síntomas atípicos, de entre ellos el más frecuente fue la tos crónica en un 19,4% de la muestra. El 70,6% respondió efectivamente al tratamiento con inhibidores de bomba de protones. De los pacientes estudiados 102 (56,7%) no presentó esofagitis erosiva en la endoscopia, mientras que 78 pacientes (43,3%) presentaron diferentes grados de esofagitis erosiva. El 7,8% de los pacientes presentaron esófago de Barrett en la endoscopia, principal complicación reportada, la misma que fue confirmada por histopatología. Además se encontró la presencia de anillo de Schatzki en 7 pacientes (3,9%), 3 presentaron divertículos esofágicos, 2 de ellos en el tercio medio del esófago y uno de ellos presentó divertículo de Zenker, 2 pacientes presentaron lesiones polipoideas de transición y un paciente esofagitis moniliásica. El 75,6% de los pacientes incluidos en el estudio presentaron hernia hiatal en la endoscopia digestiva alta. Se comprobó una relación significativa (p=0,000) entre la presencia de hernia hiatal y el grado de esofagitis. El total de pacientes diagnosticados de hernia hiatal con EDA fue del 75,6% y con manometría fue de 43,9%. Se comprobó una escasa concordancia entre estos dos métodos con respecto al diagnóstico de hernia hiatal. Se evaluaron las manometrías de los pacientes, encontrándose alteraciones manométricas en 96 pacientes, que representan el 53,3%. De estas alteraciones manométricas la más frecuente fue la hipotonía del esfínter esofágico inferior (< 13 mmHg) que se encontró en un 42,8% (77 pacientes), seguido por trastorno de la motilidad esofágica inespecificado en un 20,6% de los pacientes. No se encontró correlación significativa entre el grado de lesión esofágica y la presión o la longitud del esfínter esofágico inferior (p> 0,05). Conclusiones: La enfermedad por reflujo gastroesofágico es más frecuente en el sexo femenino, y puede aparecer en rangos amplios de edad pero existe una mayor prevalencia luego de los 40 años. El cuadro clínico más común de presentación en la ERGE es la combinación de pirosis y regurgitación, siguiéndole en frecuencia la presentación únicamente de pirosis. El síntoma atípico que con más frecuencia se presenta es la tos, seguido del dolor torácico no cardiaco. El tratamiento supresor de ácido con IBP es efectivo en la mayoría de pacientes con ERGE, por lo que es ideal como tratamiento de primera línea. Se evidencio al esófago de Barrett como la única complicación en este estudio, con tasas significativas, similares a las reportadas en investigaciones similares. La prevalencia de trastornos de la motilidad esofágica en los pacientes con ERGE es elevada (20,6%) pero aún existe controversias en si el trastorno de la motilidad esofágica es causa o consecuencia de ERGE. Es importante recalcar además que la mayoría de la población con esofagitis por reflujo gastroesofágico moderado a severo tienen hernia hiatal, y que se relaciona estrechamente con la presencia de esofagitis erosiva. Sin embargo, su presencia no implica la existencia de reflujo gastroesofágico patológico ya que solo una pequeña proporción de pacientes con hernia hiatal padecen de ERGE. Se han definido claramente factores de riesgo para el desarrollo de ERGE tales como el soprepeso y la obesidad, consumo de alcohol y tabaco. Pero no se pudo comprobar su papel en la gravedad de la misma. No existe un estudio que por sí solo pueda proporcionar suficiente evidencia de la enfermedad por reflujo gastroesofágico. Para su abordaje diagnóstico se debe incluir un estudio radiológico contrastado, endoscopia digestiva alta, manometría y pH metría.
dc.languagespa
dc.publisherPUCE
dc.rightsOpenAccess
dc.sourcePontificia Universidad Católica del Ecuador
dc.sourceRepositorio Digital de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador
dc.subjectENFERMEDADES DEL ESÓFAGO
dc.subjectREFLUJO GASTROESOFÁGICO
dc.subjectMANOMETRÍA ESOFÁGICA
dc.subjectHERNIA HIATAL
dc.subjectCARDIAS - ANATOMÍA
dc.subjectENDOSCOPIA
dc.titleAsociación de lesiones endoscópicas en pacientes con síntomas típicos de Erge y alteraciones de la manometría esofágica en el Hospital Carlos Andrade Marín en el periodo diciembre del 2014 a junio del 2015
dc.typebachelorThesis


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