Esta investigación aborda el estudio de la salud mental desde la escala de bienestar psicológico de Ryff y el trauma como estrés postraumático con la escala de Síntomas de Davidson. Se estableció la relación existente entre las diferentes dimensiones del bienestar psicológico con la frecuencia y gravedad del estrés postraumático, en mujeres víctimas de desplazamiento por violencia política. Este estudio es de tipo correlacional, de diseño no experimental, transversal. Debido a la dimensión alcanzada por el conflicto colombiano, donde el país ocupa el primer lugar con el mayor número de personas desplazadas a nivel interno, según reporte del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados ACNUR en las Tendencias Globales sobre el desplazamiento forzado en el año 2017 (p. 33), se hace imprescindible el abordaje de dicha temática y aún más al reconocer que las mujeres son víctimas y cuya afectación no sólo es física, mental y psicológicamente sino incluso a nivel relacional. Se ha demostrado mediante estudios, las consecuencias a nivel físico y psicológico que generan las personas ante los hechos violentos, Buesa & Calvete (2013) demostraron que las mujeres que son víctimas de desplazamiento forzado y que además son víctimas de violencia sexual padecen estrés postraumático. Los resultados de este estudio denotan en las mujeres víctimas de desplazamiento forzado afectación en algunas de las dimensiones del bienestar psicológico incrementando los síntomas del trauma y la gravedad del mismo, además de algunos aspectos relacionados a la salud mental.This research addresses the study of mental health from Ryff’s psychological well-being scale and trauma as post-traumatic stress with the Davidson Symptoms scale. The relationship between the different dimensions of psychological well-being with the frequency and severity of post-traumatic stress was established in women victims of displacement due to political violence. This study is correlational, non-experimental, cross-sectional. Due to the dimension reached by the Colombian conflict, where the country occupies the first place with the largest number of internally displaced persons, according to a report by the United Nations High Commissioner for Refugees UNHCR in the Global Trends on forced displacement in In 2017 (p. 33), it is essential to address this issue and even more when recognizing that women are victims and whose affectation is not only physically, mentally and psychologically but even at a relational level. It has been demonstrated through studies, the consequences at the physical and psychological level that people generate in the face of violent events, Buesa & Calvete (2013) showed that women who are victims of forced displacement and who are also victims of sexual violence suffer from post-traumatic stress. The results of this study denote in women victims of forced displacement affectation in some of the dimensions of psychological well-being, increasing the symptoms of trauma and its severity, as well as some aspects related to mental health.