Línea base energética de la empresa ASMAR de Talcahuano en el marco de la implementación de su sistema de gestión energética basado en la Norma ISO 50.001

Abstract

El sector que comprende la industria y la minería, fue el mayor consumidor de energía al año 2016, con, aproximadamente, un 40% del consumo final del país. Esta cifra se descompone así: el 24% correspondiente a la industria, y el 16%, a la minería. La energía consumida por este sector provino mayoritariamente de tres fuentes energéticas: electricidad (33%), diésel (26%) y biomasa (20%) (Ministerio de energía, 2017). En consecuencia, los políticos y la industria están comenzando a priorizar el tema en su agenda, ejemplo de esto, es el desarrollo del Sistema de Gestión de Energía (SGE, del inglés, Energy Management Systems) ISO 50.001 (Lapido et al., 2015). La tendencia, tanto nacional como internacional, apunta a buscar un desacople entre crecimiento y consumo energético mediante una mayor eficiencia energética. La norma ISO 50.001, publicada en junio de 2011, establece los requisitos que debe tener un SGE en una organización para ayudarla a mejorar su desempeño energético, aumentar su eficiencia energética y reducir los impactos ambientales, así como incrementar sus ventajas competitivas dentro de los mercados en los que participa, todo esto sin sacrificio de la productividad (AChEE, 2017). Este trabajo tiene como objetivo establecer la línea base energética de la planta industrial de Talcahuano de la empresa Asmar según la norma ISO 50.001 de eficiencia energética. Para ello se identificaron los consumos mensuales del año 2017 a través de las facturaciones de energía eléctrica y las horas hombre (HH) como variable relacionada a la producción. Se determinó la línea base usando un diagrama de dispersión correlación, que en este caso se identifica como diagrama de consumo energético versus producción. Finalmente se sugieren tres indicadores que permiten conocer el desempeño energético, posterior a la implementación de la línea base establecida. Los resultados obtenidos del diagrama de dispersión de energía propuesto señalan que posee un coeficiente de correlación de 0,52. Concluyéndose que para el campo de la energía estas variables no son representativas de un modelo de energía al cual se le exige un R2 > 0,75.