RESUMEN: Las instituciones prestadoras de servicios de salud deben contar con una administración eficiente que les permita el cumplimiento de los objetivos misionales y dar respuesta a las necesidades de las demandas de sus usuarios. El reto de organizaciones está en desarrollar capacidades administrativas que permitan el adecuado desarrollo de las actividades internas con el mayor aprovechamiento de los recursos físicos, humanos, tecnológicos, de materia prima y recursos financieros a partir de una adecuada planeación, organización, dirección, coordinación y control . Las funciones administrativas anteriormente descritas se conforman por una serie de conceptos técnicos, teóricos y prácticos que han venido evolucionando a lo largo de la historia, inicialmente desde un enfoque más funcional y jerárquico con alto predominio del trabajo por departamentos a una gestión horizontal basada en procesos como un sistema interrelacionado o interconectado el cual centra su atención sobre las actividades de la organización con el fin de optimizarlas . La administración por procesos es adecuada para las instituciones prestadoras de servicios de salud puesto que su operación implica la atención a los usuarios desde diferentes áreas que se interrelacionan con el fin de brindar la misma en coherencia con la normatividad y con alta calidad.