Si con relación a Orlando Furioso —el más logrado poema épico del Renacimiento italiano— el teatro de Ludovico Ariosto (1474-1533) se perfila como una obra menor, las comedias La cassaria (1508), I supossiti (1509), Il negromante (1509; 1520; 1528) y La Lena (1529) exponen un proceso de configuración con características peculiares del Renacimiento. La marcada influencia de la comedia palliata latina (Plauto y Terencio) se evidencia en los personajes tipos (jóvenes enamorados, viejos avaros, servidores con especuladora astucia) y se expone en el clásico esquema de articulación por juegos escénicos. Pero en sus configuraciones Ariosto refigura los tipos y enriquece el esquema estructural clásico. Articula una dialéctica entre los juegos escénicos y un eje narrativo que le permite ahondar paulatinamente en rasgos psicológicos de los personajes centrales y en el marco de la realidad socio-política. El presente estudio asedia el oficio de ruffiana de Lena, protagonista de la comedia representada en la Ferrara de los Este en 1528 y 1529. La configuración excepcional de Ariosto juega sobre remisiones a Plauto (Asinaria, Pseudulus, Bacquides) y a Boccaccio al refigurar el esquema de acción. Pero simplifica el entramado ficcional de los servidores. Ariosto no figura a la ruffiana con los motivos caricaturescos de la comedia latina, ni expone el grotesco de la Aloigia de Aretino. Instituye a Lena en eje psicológico de acontecimientos en una realidad social regida por la especulación, el egoísmo y la desconfianza.