The Learning Communities are an inclusive tool with broad academic support, which promote coexistence, tolerance and cooperation among its members. These groups take advantage of their own diversity (cultural, religious, linguistic, ethnic, gender, life forms, skill levels, etc.) to support the inclusive process, making that diversity the primary factor for educational inclusion and learning. This article shows the experience acquired in more than 3 years of coordinating the “The Piano Circle” project, a learning community that operates within the Conservatorio Superior José María Rodríguez in the city of Cuenca-Ecuador, which has managed to bring together the intellectual, social and affective dimensions of theirs participants to promote an innovative educational model that has allowed a link to the community and support for inclusion.Las Comunidades de Aprendizaje son una herramienta inclusiva con un amplio respaldo académico, promueven la convivencia, la tolerancia y la cooperación entre sus miembros. Este tipo de agrupaciones aprovechan su diversidad (cultural, religiosa, lingüística, étnica, de género, de formas de vida, de niveles de habilidad, etc.) para apoyar al proceso inclusivo, convirtiendo a dicha diversidad en el factor primordial para la inclusión educativa y el aprendizaje. El presente artículo plasma la experiencia adquirida en más de 2 años de coordinar el Proyecto El Círculo del Piano, comunidad de aprendizaje que funciona dentro del Conservatorio Superior “José María Rodríguez” de la ciudad de Cuenca- Ecuador, logrando aglutinar las dimensiones intelectuales, sociales y afectivas de sus participantes para promover un modelo educativo innovador que ha permitido una vinculación con la comunidad bajo la perspectiva de la inclusión.