La eco-región seca Litoral ecuatoriana es considerada como una de las más amenazadas en términos de extinción biológica debido a la deforestación y a otras actividades antropogénicas. Las prácticas forestales y agroforestales permiten contribuir a solucionar en parte esta problemática, su importancia radica que su aporte a los sistemas de producción es continuo y es un proceso que consolida a medaino y largo plazo el mejoramiento de los sistemas de producción.