Este artículo analiza el caso de la subcuenca Aguas Calientes en Nicaragua, en cuanto a los procesos sociales organizativos y su relación con el uso y disponibilidad del recurso hídrico. Se encontró que entre los factores que influyen en la problemática de la subcuenca están la ausencia o inaplicación de reglas y/o leyes que regulen el uso del recurso hídrico, la falta de una organización social adecuada, el desconocimiento de las fortalezas comunales y de la capacidad de resiliencia de los diferentes grupos poblacionales para dar respuesta a los problemas. Los resultados del estudio indican que en algunas comunidades el agua es más escasa y más estricta la regulación del uso. No obstante, en la parte baja de la subcuenca la regulación es pobre, principalmente en cuanto a sistemas de riego; las ordenanzas son muy generales y no se aplican; el grado de participación en las organizaciones de base es variado, y en algunos sectores el uso de suelos y aguas es inapropiado. En la parte media y baja hay disponibilidad de tecnologías que no son aprovechadas por factores económicos y organizativos. Los comités de cuencas ofrecen buenas posibilidades de gestión, pero por lo general son débiles y desorganizados. Se proponen, entonces, algunas estrategias para mejorar las condiciones ambientales y socioeconómicas, las cuales pueden formar parte de las tareas de diferentes organismos (entre ellos, los comités de cuencas). Entre esas estrategias están la implementación de una tarifa hídrica y del canon por consumo, y la coordinación entre organizaciones de base, agencias de desarrollo y gobierno local para efectivizar la labor en la conservación y optimización del recurso hídrico.