Los corredores biológicos, dentro de la Península de Osa en Costa Rica, son esencialespara el desplazamiento de los felinos y sus presas. Hoy, las poblaciones de fauna dentro de la península se encuentran en peligro como consecuencia de la fragmentación, p érdida de hábitats y por los asentamientos humanos. La metodología utilizada para este estudio partió de tres elementos fundamentales: 1) evaluación del uso del hábitat por las especies de fauna beneficiarias del corredor; 2) uso de los Sistemas de Información Geográfica (SIG) para delimitar el corredor (rutas entre rangos de calidad de hábitat); y 3) elaboración de lineamientos para el manejo del área, considerando al corredor dentro del paisaje. Los mapas mostraron que las áreas de hábitat disponibles, de excelente y buena calidad, son más reducidas para las especies Panthera onca y Puma concolor, y sus áreas de conflicto más amplias, lo que posiblemente obliga a estas especies a moverse en ambientes demasiado alterados. Para ser viables estos diseños, las zonas de la reserva deben tener un mosaico de hábitats disponibles de un ancho mínimo de 1 km. En realidad no deben ser simplemente franjas o cintas continuas de bosque. Debe hacerse un manejo más excluyente (protección) en las zonas consideradas como rutas de estos corredores.