Zamora, desde su fundación, ha desarrollado una vocación agrícola, comercial político administrativa que, ayer como hoy, la vincula fundamentalmente con el occidente del país, y en menor medida, se integra con el centro y Norte de México. Las regiones relevantes por el volumen de fuerza de trabajo que atrae para ser empleada en los trabajos que la producción de hortalizas requiere principalmente. Esta fuerza de trabajo tiene un peso demográfico decisivo en el crecimiento de la ciudad y en las modalidades sociales de este crecimiento. Así mismo, la especialización en la magnitud de la producción de algunos cultivos como fresa, papa, cebolla, jitomate y sorgo principalmente; le han dado a la región importancia en los mercados nacionales e internacionales. Estos cultivos monopolizados por algunos productores, al situarse en el mercado en épocas estratégicas, se transforman en cuantiosas ganancias debido a las mejores posibilidades de comercialización con las que cuenta con relación a sus competidores procedentes de otras regiones agrícolas del país.