El presente trabajo analiza las transformaciones económicas y sociales de un centro regional y la formación de una élite empresarial. El periodo que analizo va a definir es del porfirismo a principios de los años 60; sin embargo, el centro principal de mi interés se encuentra en las décadas que siguieron a la revolución, hasta los 50s, cuando entró en la escena el grupo social de mi interés: la élite empresarial. Esa sustituyó al grupo de hacendados que habían dominado la vida económica y política regional, desde el último tercio del siglo pasado hasta el reparto agrario; es con la caída de estos últimos, cuando se consolida la fuerza económica e influencia política de un grupo que emergió desde mediados de los 20 y que jugó en las décadas posteriores, un papel central en el desarrollo de la ciudad y de su área de influencia. El caso concreto que se analiza es el de Zamora, Michoacán, ciudad provincial ubicada en un rico valle agrícola del occidente de México. El análisis se hace a partir del papel que jugó la élite empresarial en la articulación de la región a la nación. Este proceso implicó la consolidación del centro urbano regional que concentró los recursos, la población, la industria, el comercio y los servicios del área. Los empresarios encontraron en este periodo una estructura económica y política en transición llena de posibilidades y fue precisamente su función como intermediarios en la articulación nacional, lo que les permitió su despegue económico.